Podría haberlo hecho el presidente Juan Manuel Moreno o el portavoz del Gobierno Elías Bendodo, pero lo hizo el vicepresidente: fue Juan Marín (Cs) el encargado ayer de anunciar que la Junta no descarta recurrir ante el Tribunal Constitucional el Ingreso Mínimo Vital (IMV) si constata que el Gobierno de España ha invadido competencias autonómicas.

“Veremos –dijo en los desayunos informativos de Europa Press– si realmente esa decisión del Gobierno no roza las competencias de las comunidades autónomas y es inconstitucional. Y si tenemos que recurrirla al Constitucional, lo haremos".

Las fuertes reservas expresadas por el también presidente de Cs en Andalucía contrastan con el respaldo cerrado de su partido a nivel nacional a IMV. De hecho, en el encuentro organizado por la agencia de noticias Marín estuvo respaldado por los portavoces paralmentario de PP y Vox o por los altos cargos institucionales naranjas Marta Bosquet o Rogelio Velasco, pero por ningún dirigente nacional de Cs.

El portavoz naranja en el Congreso, Edmundo Bal, dijo ayer que que “el Ingreso Mínimo vital es necesario, no puede ser que la gente llore por conseguir una bolsa de comida, es obligatorio ayudarles, no podemos dejar a nadie en el camino, no podemos abandonarles" añadió. La única exigencia que puso Bal es que el ingreso sea eficaz y “esté coordinado con las comunidades autónomas”.

El discurso de Cs a nivel estatal difiere sensiblemente del trasladado ayer por Marín, cuyas diferencias con la dirección nacional del partido han empezado a hacerse visibles en las últimas semanas, aunque se desconoce cuál sea su verdadero alcance y profundidad.

Preguntado por el IMV, el vicepresidente de la Junta y líder de Cs no dedicó ni una palabra de apoyo a la medida gubernamental que el portavoz nacional había elogiado sin reservas.

Marín puso en énfasis en señalar que desconocía “hasta qué punto entra en competencia desleal con las comunidades autónomas la decisión del Gobierno de España", cuya decisión de ceder la gestión del ingreso al País Vasco y Navarra no gusta nada a Marín: "No creo que Navarra o País Vasco sean más inteligentes que Andalucía". Y añadió: "Si tenemos que recurrirla, lo haremos"