El alcalde de Vejer, José Ortiz, fue el primero y el exministro del Interior Juan Ignacio Zoido ha sido el segundo. Pese a haber encabezado las listas del PP en Cádiz y Sevilla en las elecciones autonómicas del pasado día 2, no recogerán su acta de parlamentarios andaluces. Ortiz, hombre de confianza del líder popular Pablo Casado, seguirá en su alcaldía y Zoido continuará como diputado en el Congreso.

La presencia, algo forzada, de ambos en el Parlamento regional era pieza principal de la estrategia diseñada por la dirección nacional del partido ante la eventualidad de tener que sustituir a Juanma Moreno al frente del Grupo Popular si los resultados electorales eran tan malos como auguraban las encuestas.

Fueron, en efecto, resultados muy amargos pero encerraban una dulce sorpresa: el fracaso del ‘sorpasso’ soñado por Ciudadanos y la inesperada irrupción de VOX en la Cámara han obligado a Pablo Casado a rehacer su plan inicial de ‘liquidar’ a Moreno, que se perfila como futuro presidente de la Junta con los votos de Cs y la extrema derecha.

Zoido actualmente es presidente del Comité Electoral Nacional del PP y cada lunes asiste la reunión de maitines del Comité de Dirección del PP. Tras la renuncia de Zoido, si se respeta el orden de la lista por Sevilla, entraría como diputada Alicia Martínez, quien se situaba en cuarto puesto.

Los socialistas no han tardado en reaccionar a las renuncias de Ortiz y Zoido. El vicepresidente de la Junta y consejero de la Presidencia en funciones, Manuel Jiménez Barrios, ha acusado a José Ortiz de "engañar a sus votantes, los cuales son conscientes que han sido utilizados para una artimaña interna del Partido Popular".