No es la primera vez que con la brusca llegada del buen tiempo se multiplica el número de embarcaciones que intentan llegar a Andalucía partiendo de las costas africanas, principalmente la de Marruecos. Desde las 0 hasta las 21 horas de este viernes Salvamento Marítimo ha interceptado 62 pateras en aguas del Estrecho de Gibraltar o el Mar de Alborán y ha rescatado 686 personas de estas embarcaciones y cuatro cadáveres. 

Los medios de la derecha se han apresurado a interpretar la llegada de pateras a Andalucía como un efecto llamada por la decisión del Gobierno español de acoger a los 629 inmigrantes que viajan en el buque Acuarius que Italia se negó a acoger.

Cifras y causas

Sin embargo, los titulares deliberadamente alarmistas se avienen mal con las cifras: el gran salto en el número de inmigrantes llegados a la costa andaluza se produjo en 2017 y ha seguido aumentado durante el primer semestre de este año, mucho antes de producirse el caso Aquarius.

Según afirmaba recientemente Rafael Lara, coordinador de Solidaridad Internacional de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía, el cierre del canal de Sicilia, entre otras causas, ha provocado que “mucha gente se plantee no pasar por Libia y desviarse hasta la costa marroquí”.

Alarmismo a la carta

Medios como ABC establecen sin mayores matices una relación causa efecto entre el Aquarius y las pateras: ‘La avalancha de pateras confirma el efecto llamada del caso Acuarius en Andalucía’.

En la misma línea titula Libertad Digital: ‘¿Estamos incentivando a los inmigrantes a lanzarse al mar en un flotador? ¿Por qué lo hacen? Pues porque creen (y tienen buenas razones para creerlo) que tendrán éxito en su objetivo: establecerse en Europa’.

Para el también derechista Alerta Digital, las cosas están igualmente muy claras: ‘¡Esto ya no se aguanta! Llegan hoy a España 686 ilegales a bordo de 62 pateras y otras seis navegan hacia costas andaluzas’.

Otros, como El Español, son más profesionales y procuran afinar mejor: ‘El Gobierno niega que el 'Aquarius', la sanidad universal y la retirada de concertinas facilite la inmigración’.

Datos oscilantes

Según el balance aportado en diciembre de 2016 por el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, en 2012 fueron rescatados en nuestras costas 3.323 inmigrantes, un número que descendió sensiblemente en 2013, hasta situarse en 2.133.

Al año siguiente, 2014, la cifra fue de 3.194, similar a la registrada en 2015, cuando se contabilizaron 3.399 rescatados. El gran salto se produjo, sin embargo, en 2016 cuando casi se dobló la cifra: a falta de diez días para finalizar el recuento anual, se habían registrado 6.099 rescates.

El gran vuelco

Pero el verdadero vuelco se produjo en 2017, cuando según la estadística oficial el número de migrantes llegados en patera a Andalucía aumentó un 185% con respecto al año anterior. Un total de 17.614 inmigrantes a bordo de 803 pateras llegaron a las costas andaluzas en 2017.

Ello supuso un aumento con respecto a 2016 del 185,2 por ciento en personas y del 94,5 por ciento en pateras, puesto que el pasado año fueron 6.175 las personas rescatadas en 423 embarcaciones. Solo en diciembre de 2017 fueron rescatadas en aguas andaluzas 1.663 personas en 72 embarcaciones, un 168 por ciento más que el mismo mes del año anterior.

Destino Alemania

Las autoridades suelen recordar que en la mayoría de los casos quienes llegan en patera a España por la costa andaluza suele ser inmigración de tránsito a otros países de Europa, preferentemente Alemania. En España su objetivo suele ser Madrid o Barcelona más que en Andalucía.

Este año puede haber nuevo récord. Solo entre enero y febrero, 2.291 inmigrantes llegaron a la costa de Andalucía, un 80,7% más que en 2017. El cómputo del primer trimestre sumaba 950 personas más que en el mismo periodo de 2017: de 1.950 se ha pasado a 2.850.

Se diría, pues, que a muchos la realidad estadística les está chafando sus incendiarios titualres. Otra cosa es que decidan darse por enterados, que va a ser que no.