En una España aun convulsa por la polémica sentencia a 'La Manada' y con una sociedad movilizada y sensibilizada cada día más por los atentados a la igualdad de la mujer, la violencia de género y el machismo lacerante, que acciones del más puro marketing sexista de determinadas empresas que usan a la mujer para mejorar o ingresar más en sus cuentas, comienzan a enervar aun más y a no pasar desapercibidas.
En esta ocasión se ha dado en la localidad jiennense de Linares. Una piscina privada vende en su acción “promocional” de cara a la inminente llegada de la temporada de baños que se harán considerables abonos y descuentos. Hasta ahí todo normal pero lo grave es cuando se aprecia quienes serían las personas beneficiadas de la reducción en el abono y es que solo serían susceptibles de los descuentos las “señoritas entre 18 y 28 años”. ¿Es reclamo sexista o no? Su propietario lo niega. Negar la evidencia es un ejercicio que al final sale mal.
Reclamo y cebo para los hombres
En cuanto se ha conocido esta propuesta publicitaria la asociación Acción Feminista de Linares ha denunciado la "ventaja engañosa" que esta piscina de la ciudad ofrece a las mujeres de entre 18 y 28 años en el precio de la entrada, y critica su utilización como "reclamo, cebo" y ser un "objeto expuesto para atraer a los hombres".
Descuento de un 10 % en los abonos
La denuncia del colectivo linarense se refiere a una publicidad del recinto repartida por la localidad en la que se ofrecen descuentos en los abonos y entradas de todas las edades con la particularidad de que se ofrece un "abono especial señoritas de 18 a 28 años" de 60 euros, con un descuento de 9,50 euros respecto al que correspondería de 69,50 para jóvenes de entre 12 y 30 años. Para Acción Feminista Linares se trata de una "ventaja engañosa", ya que "si no pagas por un producto, entonces el producto eres tú" y se pregunta por qué un empresario deja entrar pagando menos en su piscina a las "señoritas", a lo que se responde que "porque quiere atraer a los inversores: los hombres, que son los que pagan la entrada".
Falsa discriminación positiva
Este "privilegio" se vende como una ventaja para las mujeres, por medio de la supuesta discriminación positiva, según explican desde el colectivo, "pero lo cierto es que las vendidas somos nosotras: Somos el reclamo, el cebo, el objeto expuesto para atraer a los hombres, conocedores del funcionamiento de este tipo de publicidad donde se anuncia un producto muy jugoso: Mujeres", aseguran en su página de Facebook. Desde Acción Feminista Linares han hecho un llamamiento "al boicot total a esta piscina por su actitud sexista", ante lo que han tenido una amplia respuesta en las redes sociales tanto criticando la publicidad de la piscina como los que creen que se le busca "los cinco pies al gato".
Caso omiso de la empresa al Ayuntamiento
Por su parte, el Ayuntamiento de Linares ha enviado un comunicado a la piscina pidiendo que se retire la publicidad de la piscina, a lo que de momento la empresa ha hecho caso omiso ya que han colocado un cartel en la puerta con esa publicidad. El colectivo feminista ha asegurado que "nuestra indignación llegó lejos y la concejalía de Igualdad se ha posicionado y han comunicado que van a tomar medidas, estaremos pendientes de que se tomen medidas reales y eficaces". También se han intentado poner en contacto con Facua y están a la espera de que se posicionen y tomen alguna medida.
La respuesta de la empresa "Piscinas Benidorm" ha sido la de afirmar que mantendrá la campaña de abonos ya que en oponión del gerente no ha existido intención de “atentar contra la dignidad de la mujer”. Según su responsable “no tiene intención alguna” de retirar la campaña ya que todos los años fijan precios especiales para colectivos de la ciudad y cree que se “ha desvirtuado la campaña y la palabra señorita.".
Facua denuncia ante la Junta de Andalucía
El nivel del caso ha crecido de tal manera que la principal organización de defensa de los consumidores, Facua, ha presentado un escrito ante el Servicio de Consumo de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía y el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) denunciando lo que entienden como publicidad sexista así como tarifas discriminatorias al estipular unos precios más reducidos para las mujeres que para los hombres. Por este motivo también ha dirigido escrito de queja a la Agencia de Defensa de la Competencia de Andalucía (ADCA).
