La Armada ha vuelto a negar este viernes "tajantemente" cualquier relación con el origen del incendio que el pasado fin de semana quemó unas 400 hectáreas del Campo de Adiestramiento de la Sierra del Retín, ubicado en una zona de alto valor ecológico de Barbate.
Fuego de personas ajenas
El responsable de estas instalaciones, el coronel Elíseo González, ha asegurado que el fuego fue "fortuito o provocado", en su opinión, por personas ajenas a un campo de 5.500 hectáreas y en el que "aproximadamente la mitad de los incendios" que se registran -tres en lo que va de este año- no han tenido relación con las prácticas militares que allí se realizan. A este campo, en el que casi 2.000 vacas están autorizadas a pastar, acuden desde personas que piden permisos para recoger productos silvestres como espárragos hasta cazadores furtivos o narcotraficantes que han llegado a ocultar en él coches con cargamentos al verse sorprendidos en sus desembarcos o que, según se sospecha, han prendido fuegos para distraer la atención.
Abre las puertas el campo de adiestramiento
El Ministerio de Defensa ha abierto hoy las puertas de este campo de adiestramiento, el único con una playa que permite hacer prácticas de desembarcos anfibios, en medio de la polémica que este último incendio ha provocado, especialmente en el pueblo de Barbate, para el que este incidente ha sido "la gota que ha colmado el vaso", en palabras de su alcalde, el socialista Rafael Quirós. La Armada ha pedido este viernes disculpas por haber transmitido información "que ha suscitado malentendidos" al afirmar, tras el incendio, que en este campo de adiestramiento no se realizaban ejercicios desde el 1 de junio.
Comunicado
En un comunicado que ha leído el coronel Elíseo González, la Armada precisa, después de que el alcalde de Barbate desmintiera este extremo, que se refería "exclusivamente a la realización de ejercicios de tiro con munición que pudiera producir incendios". En el comunicado la Armada dice que este malentendido "indujo" a error a las autoridades de la Armada, del Ministerio de Defensa y de la Delegación del Gobierno, que en estos días han insistido públicamente en que no se hacían ejercicios desde el 1 de junio. Según han explicado los responsables del campo en estas instalaciones los ejércitos hacen prácticas "todos los días" aunque desde el último incendio, el pasado mayo, no con armamento que pueda provocar incendios, porque la ley obliga a no realizarlos en época de riesgo, durante todo el verano.
"Zona de caída"
La curiosidad es que el fuego del pasado viernes estuvo localizado en la llamada "zona de caída", una área de unas 300 hectáreas en las que se realizan las prácticas con proyectiles y en la que ni los bomberos pueden entrar. "No había absolutamente nadie tirando allí", ha asegurado el coronel, que ha explicado que únicamente entraron allí, como ha atestiguado el ganadero Juan Marchante, las vacas que entran y salen solas del espacio para pastar en ese espacio tan restringido. "Pues vaya militares que tenemos entonces. Si entra la gente como Pedro por su casa el buen nombre del Ejército queda en entredicho", ha dicho a EFE el alcalde Barbate.
Alcalde de Barbate: "Pues vaya militares que tenemos entonces"
El edil dice que "acepta" las disculpas de la Armada. "Vamos avanzando, porque se ha dicho que el que mentía era yo". Pero el alcalde no quiere entrar "en dimes y diretes" y sostiene que este incendio ha roto la paciencia de un pueblo al que "le han quitado la mitad de su termino municipal" y que, según dice, está más que dispuesto a devolver a Defensa los "270 millones" que les dieron en 1982 cuando expropiaron estos terrenos comunales. Aún así el alcalde reconoce que esta zona ecológica se ha mantenido alejada "del ladrillazo" porque estaban allí los militares, que, según han contado hoy, han logrado que este sea el primero de Europa en recibir una certificación medioambiental.