La película documental sobre Luis Cernuda entra en el tramo final de su realización. Los rodajes que comenzaron en 2019 van a concluir esta semana en diferentes lugares de Andalucía, tras su paso esta misma semana por Murcia. Así, el martes y miércoles hubo rodaje en localizaciones de Almería y Granada (Centro Lorca) y desde ayer 21 de octubre ha continuado en Sevilla, la ciudad natal del poeta Luis Cernuda.

El lunes próximo el equipo de ‘Luis Cernuda, el habitante del olvido’ se volverá a Granada, a la Casa Natal de Fuente Vaqueros y cerrará el martes en Torremolinos (Málaga). Con el apoyo sobre el terreno de Sevilla Film Office y la colaboración directa en cuanto a permisos de la Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, se recorrerán lugares y espacios de la vida del poeta en la ciudad. También habrá una escena importante rodada en interior de una casa del Barrio de Santa Cruz.

Ya en los pasados meses de abril y mayo se realizó el rodaje en diferentes escenarios de Málaga y su provincia (Manilva, Casares, Campillos) y en otras localidades andaluzas como Guillena (Sevilla).

Es la recta final de la producción que arrancó en 2019 y que en 2022 verá la luz en el 120 aniversario del nacimiento del poeta. La cinta que se estrenará en festivales y espera llegar a los cines de toda España.

 La productora andaluza Atrapasueños (fundada en 1999) ha impulsado este documental, que cuenta con la autorización y colaboración de los herederos de Luis Cernuda, así como el apoyo de varias instituciones tanto locales (Ayuntamientos de Málaga y Sevilla, entre otros) como supramunicipales, como las diputaciones de Córdoba, Málaga, Sevilla y Huelva y el Instituto Cervantes. 

Según los productores del documental, "una de las primeras reivindicaciones vitales (y hasta poéticas) del autor fue la defensa de su amor en libertad, en su concepción más amplia y humana. Sin duda, un hombre con una valentía y una forma de sentir tan especial que dejaría su impronta en maravillosos versos".

"Su compromiso político –añaden– le llevó a experiencias tan importantes e intensas como fue la de combatir en la Guerra Civil en defensa de la República. Un modelo de estado y sobre todo una apuesta por una España nueva que le llevó a ser uno de los activistas de aquellas misiones pedagógicas en tiempos de la  II República. La fama de persona alejada de la realidad contrasta cuando se conoce su apasionada dedicación en las misiones pedagógicas durante la II República".

El exilio fue por sus ideas y fue sin duda un exilio que sigue aún produciendo dolor desde la memoria. Un exilio del que nunca volvió y nunca quiso volver, precisamente porque aquí como él decía, "gobernaba la canalla asesina"