Noche difícil para la izquierda la del 10 de noviembre. Difícil para el Partido Socialista, pero difícil también para Unidas Podemos, que ha pagado un alto precio –en Andalucía ha perdido tres de sus nueve diputados– por una repetición electoral de la que un porcentaje significativo de votantes de la izquierda ha culpado a Pablo Iglesias.

Lo mismo que esos votantes que culpabilizan a Iglesias parece pensar Teresa Rodríguez, coordinadora de Podemos en Andalucía y cabeza visible de la corriente morada más abiertamente discrepante con el empeño de Iglesias de entrar en un Gobierno de coalición con el PSOE.

Significativamente, Rodríguez no compareció anoche en la sede de Podemos Andalucía para valorar los resultados del 10-N. Lo hicieron el coordinador andaluz de IU, Toni Valero, y el secretario Político y de Comunicación de Podemos, Pablo Pérez Ganfornina. Rodríguez tiene una inclinación a la franqueza que le habría dificultado mucho morderse la lengua en una noche como la de ayer.

Su opinión sobre lo sucedido en la jornada electoral la expresaba Teresa Rodríguez en este tuit publicado en su cuenta oficial a las 21:54 de la noche:

“Malditos sean quienes decidieron darle gratuitamente una segunda oportunidad a la extrema derecha. Maldita su irresponsabilidad y su connivencia. Es imperdonable y lo pagaremos muy caro”.

En su mensaje, la líder de Podemos no discriminaba entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, ni entre el PSOE y Unidas Podemos, sino que implícitamente los incluía a ambos en el paquete de irresponsables que le han dado “una segunda oportunidad a la extrema derecha”.

Desde la buena fe hermenéutica es imposible no interpretar que, con su tuit, Rodríguez estaba disparando tanto contra Sánchez como contra Iglesias. Para cerrar el paso a esa interpretación que certifica la brecha interna de Podemos, le habría bastado con citar explícitamente a Sánchez y a los socialistas como los unicos “malditos” cuya conducta resulta “imperdonable”.