Debería haberlo hecho hace mucho tiempo, pero por fin ha sido hoy. El consejo de administración de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA) ha cesado como secretario adjunto de este órgano en su reunión de este miércoles a Luis García Navarro, abogado del PP en el juicio de los ERE.

El letrado ha estado presente en todas las sesiones del juicio desde que comenzó en diciembre pasado y con anterioridad llevó el peso de la acusación particular en la macrocausa, y ello a pesar de que su contrato desde 2008 con la RTVA es con exclusividad y su sueldo anual supera los 65.000 euros.

Tal vez por ello ni siquiera los consejeros a propuesta del PP se han atrevido a votar en contra del tan escandalosa prebenda: se han limitado a abstenerse frente a los votos favorables a la destitución de los consejeros a propuesta del PSOE e IULV-CA. 

Ciudadanos y Podemos no tienen representación en el consejo porque, contra lo que es preceptivo, no ha sido renovado pese a que la actual composición del Parlamento andaluz poco tiene que ver con la que refleja la del consejo de administración. No obstante, la diputada del Cs Isabel Albás le ha pedido a la Junta que "sea firme y le exija ya el importe económico que este señor del PP ha cobrado indebidamente".

El caso que nadie vio

Fue la propia dirección de Recursos Humanos de la Radio Televisión de Andalucía la que en mayo pasado abrió un expediente informativo a García Navarro, tras una información publicada en Diario de Sevilla. No obstante, el ‘chollo de García Navarro’ difícilmente podía no ser conocido por las RTVA: tanto porque siempre ha estado presente en todas las sesiones del juicio de los ERE como porque el caso ya fue publicado en marzo del año 2012 por el diario Público.es.

La información firmada por el periodista Jorge Otero se titulaba así: ‘El abogado del PP en el caso de los ERE incumple la Ley de Incompatibilidades’; el subtítulo rezaba: ‘El PP contrata a un abogado que cobra de la RTVA por un puesto de dedicación exclusiva, aunque el letrado dice que él no incumple ninguna ley’.

Según recogía la información, una de las cláusulas su contrato estipulaba lo siguiente: “El desempeño de la actividad a la que se hace referencia en el contrato, será incompatible con el ejercicio o desempeño de cualquier cargo, servicio, profesión o actividad, que impida o menoscabe el estricto cumplimiento de los deberes propios de la actividad”.

"Mera intoxicación"

La información precisaba que si García Navarro hubiera querido ejercer la abogacía tendría que haber presentado una declaración de compatibilidad en la Consejería de Presidencia de la Junta de Andalucía, algo que no había hecho. Con anterioridad, el entonces secretario del Consejo de Administración a propuesta del PSOE solicitó un permiso de compatibilidad que le fue denegado.

Luis García Navarro declaró a Público.es que el único requisito para optar al puesto en RTVA consistía en ser licenciado en Derecho. “No estoy incumpliendo ninguna ley”, aseguró al digital, cuyas noticias al respecto calificó de “intoxicación”. También se escudó en que hasta esa fecha “nadie le había dicho nada” sobre una posible incompatibilidad.

Cuando el caso resucitó en mayo pasado, la secretaria general del PP andaluz, Dolores López, echó balones fuera en rueda de prensa diciendo que el letrado llevaba desde 2008 trabajando para la RTVA y por tanto es este ente, “que en diez años no ha dicho nada”, el que "tendrá que responder".