En Málaga ha sentado muy mal la decisión del alcalde madrileño, Martínez-Almeida, de reponer la calle que homenajea al siniestro Crucero Baleares que colaboró asesinando “a cañonazos” a miles de republicanos -la mayoría niños, mujeres y ancianos malagueños- que huían del terror del ejército franquista. Más de 350.000 personas huyeron a pie en una durísima y larga caminata y un número superior a 5.000 fallecieron en el camino en un sándwich sanguinario acosados desde tierra, mar y aire. En ese papel represor, los disparos desde el litoral -la carretera circula paralela a la playa- del Crucero Baleares fueron fundamentales en el acribillamiento de los huidos en lo que se considera la mayor masacre de la guerra contra la población civil, la conocida popularmente como la “Desbandá”.

Rechazo de los malagueños

Esta decisión suena a provocación y está empezando a recibir el rechazo de la sociedad malagueña que siente la “Desbandá” como una tragedia colectiva y sangrienta. De igual modo, el portavoz socialista exige al alcalde de Málaga que escriba directamente a su homólogo madrileño para que "recapacite por sus actos que faltan el respeto a miles de malagueños y malagueñas que perdieron la vida en este éxodo masivo que acabó en masacre civil", al tiempo que le recuerda al primer edil que "aún mantiene el nombre de militares franquistas en las calles de la ciudad".

La iniciativa del portavoz socialista en el Ayuntamiento de Málaga, Daniel Pérez, de reprobar al alcalde de Madrid desde el propio pleno del consistorio malagueño si no retira la placa, está recibiendo apoyos de quienes creen que se trata de toda una ignominia y un agravio a los malagueños.

Alcalde equidistante

Hoy Pérez recrudece sus críticas y recrimina al alcalde de la ciudad, el popular Francisco de la Torre, "su actitud equidistante" al no exigir al alcalde de Madrid que "recapacite por sus actos que faltan el respeto a miles de malagueños y malagueñas que perdieron la vida en este éxodo masivo que acabó en masacre civil. No puede permanecer callado, tiene que tomar partido en esta situación, por decencia y dignidad democrática con víctimas y familiares".

“Postureo” de De la Torre

"Al señor De la Torre, que tanto le gusta acudir a los actos de memoria histórica debería dejar el postureo y ser un fiel defensor de la retirada de estas calles de inmediato, de lo contrario estará dando a entender lo que todos pensamos, que no es capaz de condenar estas situaciones de manera rotunda", ha explicado el portavoz, quien advierte que "su labor como primer edil debe ser "defender a las víctimas y familiares de la vejación que supone mantener estas calles".

Además, Pérez ha vuelto a exigir a De la Torre que "aún mantiene el nombre de militares franquistas en las calles de la ciudad, como son los casos de Carlos Haya y García Morato: "Estas personas no son merecedoras a nuestro juicio de este privilegio, pero, pese a contar con una obligación legal, el alcalde ha hecho todo lo posible por no llevar a cabo estos cambios en la ciudad, dejando que el franquismo aún tenga representatividad en nuestro callejero".

Ciudadanos, ¿qué hará?

De este modo, el dirigente ha finalizado interpelando al equipo de gobierno, incluido Ciudadanos, "para que tomen una medida de manera urgente, o tendremos que llevar a cabo medidas para reclamar que se acabe con este insulto constante. Si realmente quieren concordia desde la derecha, esto pasa por la reparación de las víctimas, y eso es imposible cuando los muertos siguen en las cunetas y los asesinos mantienen honores en las calles".

Solidaridad de Carme Chaparro

El rechazo a la decisión de rotular la calle se extiende en redes y medios desde distintos frentes. Destaca, entre otros muchos, el muy duro tuit de Carme Chaparro en solidaridad con las víctimas malagueñas. La popular periodista de Mediaset recrimina esta decisión con datos históricos de la masacre: “La Desbandá. Una de las matanzas más crueles y desconocidas de la Guerra Civil. Barcos aniquilando a miles de civiles malagueños que huían de la toma de la ciudad.

Tuit de Chaparro sobre memoria histórica