La Andalucía actual configurada como Comunidad autónoma no fue algo regalado. Fue todo un proceso plagado de obstáculos que el pueblo andaluz fue venciendo. Pocas regiones pueden dar ejemplo de obtención de su autogobierno, con esfuerzo pero de manera pacífica y cívica, más que Andalucía.

El movimiento arranca tras la muerte del dictador en paralelo a la Transición política en España. Cabe recordar la primera gran movilización el 4 de diciembre de 1977, donde 1.500.000 de andaluces se manifestaron en las ocho capitales de provincia para reclamar la autonomía. De ahí el primer logro, la concesión de la preautonomía a Andalucía en abril de 1978.

La Junta de Andalucía

La Junta de Andalucía se constituyó en junio de 1979 y con el apoyo y respaldo de la mayoría de los ayuntamientos andaluces, exige acogerse a la vía rápida autonómica, una vía para las nacionalidades históricas para lograr mayor número de competencias. El más importante hito histórico lo constituye el 28 de febrero de 1980 con la celebración del Referéndum Autonómico que triunfa en siete de las ocho provincias andaluzas a pesar de innumerables obstáculos y escasez de medios para celebrarlo. Pero el respaldo fue tan amplio que se logró modificar la Ley Orgánica para desbloquear la autonomía andaluza que se completó con la aprobación del Estatuto de Autonomía de nuevo en referéndum.

Este largo camino está jalonado de anécdotas e historias. Son curiosidades y hechos de todo un proceso y con protagonistas concretos. Hoy, 28 de Febrero de 2023, Día de Andalucía, recordamos algunas.

La huelga de hambre de Escuredo: Café sin azúcar y mucho tabaco

Comenzaremos con un hecho que aunque singular y modesto, dio un acelerón enorme a la conquista de la autonomía, la concienciación del pueblo andaluz y que significó el arranque hacia la carrera para caminar por la vía del artículo 151, el reservado a las nacionalidades históricas frente a la vía lenta del 143 como deseaba el Gobierno central de la UCD respaldado por el embrión de lo que hoy es el PP, la Alianza Popular de Manuel Fraga. Se trata de la huelga de hambre que protagonizó el presidente Rafael Escuredo. Los medios y fondos del Ejecutivo central para poder llevar a cabo la campaña del referéndum no llegaban (recordemos que en ese momento el ente autonómico andaluz carecía de fondos para ejecutarlo). Además el convocante de la consulta era el propio Estado y jugaba con un censo desfasado de 1970 con lo que se añadía el obstáculo de que todos los andaluces muertos en la década, entre 1970 y 1980, se contabilizarían como noes en la consulta.

Ante esas y otras dificultades impuestas para que se perdiera el referéndum, el presidente Rafael Escuredo, con el objeto de atraer la atención nacional e internacional y ganar adeptos a la causa, decidió declararse en huelga de hambre. Testigos directos de ese momento han narrado pequeños detalles de esa intrahistoria como que durante la huelga de hambre el único alimento recibido fue café solo sin azúcar y ello tras un amplio debate para acordar que esta ingesta no rompía la huelga. Además del café, también agua y sobe todo mucho tabaco. Durante la huelga Rafael Escuredo recibió la visita, entre otros, de Felipe González, Alfonso Guerra y el líder del PSC Joan Raventós.

La ininteligible pregunta del Gobierno de la UCD en el referéndum andaluz

El gobierno de Adolfo Suárez puso todos los obstáculos posibles, y más, para intentar que la vía al 151 descarrilara y el referéndum fracasara. Para los anales de la historia se quedará la pregunta que los andaluces tuvieron que ver en su papeleta de voto, un texto surrealista e ininteligible que se prestaba a la confusión: ¿Da usted su acuerdo a la ratificación de la iniciativa prevista en el artículo ciento cincuenta y uno de la Constitución a efectos de la tramitación por el procedimiento establecido en dicho artículo? Además de farragoso y complejo, el Gobierno de Madrid decidió no incluir en la pregunta la palabra Andalucía ni la de Autonomía, algo solo entendible desde el deseo de confundir al votante.

Día de Andalucía

Prohibición de contratar publicidad

A diferencia de las campañas de las consultas de Cataluña y el País Vasco, en Andalucía se prohibió a los medios de comunicación estatales que admitiesen contratar publicidad del referéndum. Es importante llamar la atención de que en Almería, Córdoba, Huelva y Jaén sólo había medios de comunicación de Estado. No se permitió a los defensores del Sí defender en Televisión Española su postura favorable.

Lauren Postigo: “Andaluz no te dejes engañar, este no es tu referéndum”

Durante la campaña en la que se limitó el acceso de los partidarios del SÍ, hubo que soportar el slogan institucional de la campaña del Gobierno central. Fue la famosa  voz de Lauren Postigo: «Andaluz no te dejes engañar, este no es tu referéndum», repetida machaconamente en las numerosas radios del Estado.

Una pintada tan famosa como premonitoria

Una anécdota ha sido recordada en distintas ocasiones. Se trata de una pintada difundida por la prensa en aquellos momentos tan importantes previos al referéndum esencial  en la historia autonómica. Una simple pintada pero que auguraba mucho del futuro político de Adolfo Suárez. El texto de la famosa y premonitoria pintada decía: 'Suárez, ten cuidado con Andalucía”.  Y así fue, el 28F le pasó factura a Suárez, a la UCD y a la derecha en Andalucía durante mucho tiempo.

La “Larga Marcha” de Escuredo: agotado, demacrado y más delgado

Para vencer todas las dificultades que se auguraban y concienciar al pueblo andaluz, en el verano del 79 Rafael realiza su “Larga Marcha” particular recorriendo a un ritmo frenético más de un centenar de localidades andaluzas, hablando con la gente en las calles, protagonizando plenos extraordinarios en los ayuntamientos que le dejaron y llenando de ilusión el mapa regional. Un caso extraño fue el del Ayuntamiento de Córdoba, donde Julio Anguita, a la sazón alcalde de la ciudad, se negó a que el pleno extraordinario fuera presidido por Escuredo por no pertenecer a la corporación municipal. La gira por Andalucía fue agotadora y como señalan las crónicas se pudo ver a un presidente de Andalucía a punto de la extenuación, demacrado y más delgado. La intensidad de su gira, la tensión el calor de un verano horrible y las pésimas carreteras andaluzas de esa época, contribuyeron a darle un carácter épico a esa gira.

Escuredo con Franco y José Antonio

La gira tiene imágenes para la historia. Una de ellas fue el pleno en Besares (Almería), con solo 103 habitantes y cinco concejales. Hubo localidades donde el alcalde hacía esperar al presidente andaluz, un desprecio de los opositores a la autonomía. Es el caso de Villanueva de Mesía en Granada. Tras una larga espera, el pleno se celebró aunque Escuredo tuvo que soportar que dos cuadros presidieran el salón municipal, el del dictador Francisco Franco y el del fundador de Falange, José Antonio Primo de Rivera. Pero Escuredo volvió para Sevilla con otro pleno que aprobaba el 151 en su mochila.

Conciertos por el SÍ: Alameda, Silvio, Tabletom, María Jiménez, Pata Negra, Kiko Veneno, Gerena, Camarón y Carlos Cano

Y comenzó la campaña atrayendo a la gente con música en conciertos que cerraba Rafael Escuredo. Esta es la nómina de artistas andaluices que contribuyeron con sus actuaciones al éxito autonómico: Alameda, Silvio y Luzbel, Tabletom, María Jiménez, Pata Negra y Camarón de la Isla, Kiko Veneno Manuel Gerena y Carlos Cano. Cuentan las crónicas que en uno de estos ocho conciertos masivos el poeta y miembro del PCE, Rafael Alberti, le preguntó sorprendido: "Rafael ¿Tú crees necesaria esta escandalera?". Y Escuredo le contestó provocando la risa del escritor del Puerto de Santa María"¿Tú no ves lo contenta que está la gente, hombre?". Estos conciertos apelaron a la alegría del pueblo andaluz pero también a sus sentimientos. Comenzaban con parte del repertorio antes citado y terminaba con Carlos Cano cantando la Verdiblanca poniendo el vello de punta. Luego llegaba el final con el emotivo y buen verbo de Rafael Escuredo y tras él el cierre con el himno de Andalucía y el respeto de los asistentes con su silencio y la luz en la  oscuridad de los encendedores (no había móviles, claro).

Escuredo sin derecho a voto

Las dificultades impuestas al electorado andaluz llegaron incluso al propio promotor y protagonista del referéndum, al presidente andaluz. Cuando el propio Rafael Escuredo acudió a su colegio electoral durante la mañana del 28 de febrero de 1980, tuvo que ver con sorpresa desagradable que ni él mismo podía vota ya que su nombre, como el de tantos andaluces con derecho a sufragio, no aparecía en el censo. Tras el estupor y numerosas y aceleradas gestiones con larga espera incluida, pudo finalmente ejercer su derecho.

“Han votado cómodamente los muertos”

La última anécdota que reseñamos también se protagonizó ese día y fue cuando Rafael Escuredo vio como su hija de siete años, Patricia, en cambio sí figuraba en el censo electoral como votante. Célebre es su frase tras depositar la papeleta en la urna: “En este referéndum han votado cómodamente los muertos mientras los vivos hemos tenido serias dificultades para hacerlo”.