Agosto Investidura Rajoy

El pasado 18 de agosto Ana Pastor compareció ante los medios para anunciar que Mariano Rajoy se sometería a la confianza de la Cámara en una sesión de investidura que daría comienzo este 30 de agosto. Tuvimos que esperar casi un mes para que el presidente en funciones comunicara a la presidenta del Congreso que estaba listo.

La presidenta de las Cortes se hizo de rogar. Tanto, que incluso el líder socialista, Pedro Sánchez, mandó 24 horas antes un ultimátum: o Rajoy y Pastor ponían fecha a la investidura antes de terminar esa semana o el PSOE no dudaría en presentar una iniciativa para forzar la situación.

Y es que, tras el encargo del Rey, Rajoy dejó en el aire que se presentara a la investidura sin apoyos y, sin entrar en la constitucionalidad o no de su decisión, lo cierto es que fue una contradicción del PP ya que el pasado febrero el portavoz del Grupo Popular, Rafael Hernando, envió un documento a la Mesa del Congreso mencionando que la ley obligaba a convocar de manera “inmediata” el debate de investidura.

El líder popular siempre ha defendido que a la investidura se va para ganarla, sin embargo, y a pesar de dilatar una y otra vez los plazos, se someterá a la confianza del hemiciclo sin el respaldo parlamentario necesario. A pesar de que se ha tomado su tiempo en esta "larga caminata", sigue sin contar con los votos necesarios. Se presenta a esta investidura con 170 escaños (PP+C's+CC).

Parecía que Rajoy se iba a quedar solo, sin apoyos, nadie quería pactar con él un eventual acuerdo de investidura. Pero entonces, apareció su fiel escudero, Albert Rivera, quien anunció que los naranjas se abstendrían en una segunda votación. Esto no era suficiente, así que el líder de Ciudadanos pasó del 'no', a la abstención para acabar en el 'sí', por favor. Poco a poco, Rivera se ha ido tragando sapos , lo que ha facilitado su matrimonio.

Los escaños de PP y Ciudadanos suman un montante de 169, al que se suma el de Coalición Canaria. Un respaldo parlamentario de 170 diputados que aún necesitaría 6 abstenciones u 11 votos favorables.

El portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Rafael Hernando, tras firmar el acuerdo de investidura con Coalición Canaria, no ha dudado en calentar el ambiente para esta tarde.

Hernando ha emplazado a Pedro Sánchez a que se deje de "excusas" y a que durante su intervención mañana en el debate de investidura sea "sincero" y aclare si lo que de verdad desea son unas terceras elecciones.

"En cualquier país del mundo la mayoría que tiene Rajoy sería suficiente para formar gobierno. Lo que pasa es que en esos países suele haber gente responsable que acepta las derrotas. Y aquí hay gente que no ha aceptado la derrota", ha alertado.

El problema es que a Hernando se le olvida que, en cualquier país decente del mundo, el presidente del Gobierno habría dimitido tras conocerse sus famosos mensajes de “Luis se fuerte”.

La red social Twitter se ha volcado con la investidura de Mariano Rajoy hasta tal punto que ha creado un emoticono con la cara del presidente del Gobierno en funciones. Escribiendo en hashtag #InvestiduraRajoy, a cualquier usuario le aparecerá este nuevo icono, una iniciativa que ya tuvo esta red social durante las anteriores elecciones y que esta vez se extrena en una sesión de investidura, ya que no lo hizo con la anterior de Pedro Sánchez.

Los 'emojis', como forma de expresión y comunicación política han llegado para quedarse.

La sesión de investidura dará comienzo a las 16:00 pm de este martes y el formato escogido por Ana Pastor y Mariano Rajoy es exactamente el mismo que adoptó Pedro Sánchez, ese que tanto criticaron los populares. El portavoz del PP, Rafael Hernando, se llenó la boca tildando de "cacicada" y demás perlas semejantes por el horario establecido por Paxti López.

Durante una comparecencia el pasado febero el portavoz del PP en el Congreso afirmó entre risas que "el martes día uno empiece el pleno por la tarde con el monólogo del señor Sánchez, a mayor gloria del señor Sánchez". De hecho llegó a afirmar que el anterior presidente del Congreso estaba "al servicio" del líder socialista y lo calificó de "indecente".

El grupo parlamentario de Unidos Podemos se ha reunido esta mañana para preparar la sesión de esta tarde y mañana, en la que sus diferentes portavoces responderán al discurso del candidato Mariano Rajoy.

De los 30 minutos que tiene el partido en su turno de réplica, han anunciado que se los repatirán proporcionalmente atendiendo a sus resultados del 26J. Hablarán Pablo Iglesias, Xavier Domènech, Alberto Garzón y Alexandra Fernández.

Aquí os dejamos nuestro artículo repasando los resultados de las anteriores sesiones de investidura de la democracia, así como algunas curiosidades de ellas. Además nuestro gráfico con los apoyos y rechazos que hubo en cada una de ellas.

La sesión de investidura comenzará hoy con la ponencia del presidente en funciones y candidato a ser investido. Siempre es aventurado vaticinar qué dirá cada cual, pero en el caso de Rajoy es más sencillo de predecir: su discurso no ha cambiado desde el 20D. 

El líder popular ha traspasado la pantalla de plasma para decir siempre lo mismo, y no nos referimos a eso de "muy españoles y mucho españoles". En todas sus comparecencias, sobre todo tras el 26J, Rajoy ha pedido prontitud y celeridad al resto de formaciones para formar un Gobierno lo antes posible y con estabilidad para afrontar los desafíos que tiene que afrontar España. Esta es la idea principal sobre la que pivotará su discurso.

Las urgencias de España ya las ha repetido una y otra vez, daba igual la razón de su comparecencia, las metía con calzador:

-El desafío soberanista de Cataluña.

-El marco europeo.

-Seguir con la inercia de los datos macroeconómicos.

-Cumplir con la senda del déficit impuesta por Bruselas.

-El desafío del terrorismo.

El discurso será largo y muchos serán los matices. Pero estas ideas quedarán reflejadas junto a otra que será también fundamental: aplicar más presión aún a Pedro Sánchez. Por celeridad, sentido de estado y urgencia, Rajoy instará al líder socialista a abastenerse. Eso sí, el presidente en funciones no ha movido ni un dedo desde el pasado diciembre. Por lo que el 'no' se mantiene.

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El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha dado a entender -una vez más- que en sus conversaciones con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, han abordado el escenario político que se abre tras el previsible fracaso de la investidura de Mariano Rajoy y las posibles alternativas de Gobierno.

Aunque el pasado 18 de agosto el PSOE negó que Sánchez hubiera abordado ese día con Iglesias posibles negociaciones para formar un Gobierno alternativo ante el "hipotético fracaso" del líder del PP, hoy el secretario general de Podemos ha vuelto a sugerir que ese diálogo existe.

Preguntado por el desmentido de los socialistas, el líder de Podemos ha respondido: "Yo le invitaría a que se preguntara algo: Si el secretario general de la primera fuerza política en España que va a votar que no a la investidura de Rajoy habla con el secretario general de la tercera fuerza política en España que va a votar que no a Rajoy, ¿usted concibe como hipótesis que no hablen del escenario posterior al fracaso de Rajoy en el Congreso?", ha dicho.

Pedro Sánchez ya afirmó en su momento que él hablaba con Iglesias al igual que habla con el resto de líderes políticos, pero que es el tiempo de Rajoy.

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El emoticono con la cara de Mariano Rajoy creado por Twitter para la sesión de investidura no ha gustado mucho al PSOE que ha propuesto uno alternativo. Para los de Pedro Sánchez, lo que mejor define al candidato del PP es un sobre, en referencia clara al caso Bárcenas.

Mariano Rajoy acaba de llegar al Congreso de los Diputados y dice estar animado. A pesar de que la investidura se prevé fallida, el ánimo del presidente en funciones no decae. Hoy, hablará él solo y mañana se producirán las réplicas de los líderes del resto de formaciones.

Jorge Fernández Díaz ha afirmado a su llegada al Congreso que son conscientes de que 170 diputados no son suficientes para investir a Rajoy, pero también dice que si serían suficientes para poder gobernar con cierta estabilidad.

Asimismo, al igual que han hecho todos los dirigentes del PP, apela a la urgencia de formar un Ejecutivo y habla de la "reputación de España" en el exterior en caso de que hubiera terceras elecciones.

Pablo Iglesias ha llegado al hemiciclo con un mensaje claro y habla ya de alternativa: "Las fuerzas políticas que votamos que 'no', nos tendremos que poner de acuerdo para una alternativa". También ha afirmado que "si el PSOE no quiere, habra nuevas elecciones", aumentando -aún más si cabe- la presión sobre Pedro Sánchez.

Rahoy ha defendido en numerosas ocasiones que a la investidura se va para ganarla y que no se puede perder el tiempo. ¿A qué se debe este cambio de opinión? El presidente en funciones ha enunciado las tres cuestiones que le han llevado a aceptar el encargo del Rey y someterse a la confianza de la Cámara -aunque no tuviera los votos necesarios-:

-Un Gobierno eficaz y formado con urgencia para responder a los desafíos de España.

-El respeto a la voluntad de la mayoría, ya que el PP ha ganado las elecciones.

-No existe una alternativa viable

"En España no nos podemos apañar con un Gobierno efímero". De esta manera Rajoy defiende la idea de que lo importante no es ser investido, sino que exista un Gobierno capaz de gobernar, y para ello, debe ser un un Ejecutivo estable y con un amplio respaldo parlamentario que le permita tomar decisiones.

Es paradójico que el líder popular hable de la necesidad de ganar apoyos, ya que desde el 20D no ha movido su postura. Tras el 26J ni se sentó a negociar, de ehcho declinó el encargo del Rey. Ahora, solo ha negociado con Ciudadanos y no ha realizado oferta alguna al PSOE.

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Y llegó el momento del fantasma de las terceras elecciones. Mariano Rajoy ya ha sacado a colación la posibilidad de tener una nueva cita con las urnas si no se alcanzan acuerdos: "Sin acuerdos no se podrían evitar nuevas elecciones".

Y es que, ya tardaba mucho en mencionar la tripitición de elecciones, uno de los argumentos centrales del dicurso y que va encaminado a presionar al PSOE.

El candidato de esta investidura asegura que "el acuerdo de investidura que hemos alcanzado con Ciudadanos y Coalición Canaria" foementaría que la situación económica en España continúe mejorando. De esta manera hace un llamamiento al resto de formaciones -se deduce que en concreto al PSOE- a adherirse a su acuerdo para contar con una mayoría amplia. "Queda mucho por hacer y lo haríamos mejor si contásemos con un amplio respaldo".

Rajoy habla de "obligación europea" a la hora de mencionar la senda del déficit impuesta por Bruselas, que debe bajar del 3% en dos años. En este sentido, el presidente en funciones ha aseverado que "no se debe gastar lo que no tiene". Y, también en este sentido, en ELPLURAL.COM ya nos preguntamos : ¿De dónde sacará el PP los 28.500 millones de euros más de gasto público que implica su acuerdo con Ciudadanos?

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"Les propongo un diálogo para fortalecer nuestro sistema poúblico de pensiones". Esta es la elocuente propuesta del primer presidente de la historia democrática de España que mete la mano en la hucha de las pensiones. Tanto es así, que según la Autoridad Fiscal la hucha de las pensiones no da más de así: en 2018 no habrá fondos.

"Tenemos la oligación de preservar nuestro sistema de pensiones", ha dicho Rajoy. Como afirmación queda muy bien de cara a la galería, pero lo cierto es que el diálogo no irá encaminado a "fortalecer el sistema público de pensiones", sino que tendrá que ir destrinado a encontrar una alternativa para sufragarlas gracias a la gestión del líder popular.

"Hemos puesto en marcha mecanismos para recuperar hasta el último euro robado por los corruptos". "Todo esto se ha hecho ya". Estas son algunas de las perlas que ha soltado Rajoy. Unas palabras que en boca de quien puso en marcha la amnistía fiscal de Montoro resultan, cuanto menos contradictorias.

También ha espetado que "la corrupción se persigue más que nunca". Eso sí, se le habrá olvidado mencionar que él mismo es el presidente de un partido político imputado como tal.