Casi cada semana, porque así también lo busca WhatsApp como forma de estar en el candelero, hay algo nuevo o no tan nuevo que contar de la aplicación. Sus más de 1.200 millones de usuarios parece que demandan estrenar funcionalidades que, sin embargo, en la mayoría de las ocasiones –esto es una suposición porque no hay estadísticas al respecto- poco o nada se utilizan.

Sin embargo, pocos se han parado a pensar que la app del teléfono verde, como sucede con otras similares, también se reserva el derecho a la hora de cancelar tu cuenta.

Esto se solucionaría si, cuando nos damos de alta, dedicásemos unos minutos a leer los términos y condiciones a los que, por regla general, damos el visto bueno sin pararnos a analizar sus consecuencias, que son muchas y van más allá de la posibilidad de que nos cierren nuestra cuenta.

Y ojo porque si la app propiedad de Facebook decide darte de baja, lo puede hacer temporalmente o de por vida, algo que a más de uno no le haría demasiada gracia.

Spam, racistas, propiedad intelectual...

Como estamos casi seguros de que no te has leído esos criterios, ahí va un resumen de los motivos por los que puedes quedarte sin WhatsApp, y cuidado porque son mucho más extensos y abarcan muchas opciones relacionadas, incluso, con lo que publicas en la propia aplicación.

  1. El primero de ellos, aunque el orden que establecemos aquí no es el mismo que fija la compañía de Mark Zuckerberg, es que te penalizarán si utilizas la plataforma para lanzar Spam. Por ello, ten mucha precaución a dar ‘bola’ a esos mensajes que te piden ser reenviados a un número concreto de usuarios.
  2. En relación con lo anterior, también dejarás de utilizarla si se detecta el envío de mensajes infectados por virus.
  3. Serás obligado a abandonar tu estatus de whatsappero si suplantas la identidad de alguien, con independencia de las causas que alegues, o si te bloquea un número importante de usuarios, al igual que si decides (tú sabrás por qué) enviar archivos o mensajes a personas con las que no estás conectado a través de la app.
  4. El incumplimiento de la prohibición de publicar y enviar fotos, vídeos o mensajes de carácter homófobo, racista o xenófobo, por poner algunos ejemplos, conllevará el cierre de una cuenta, al considerarse ilegal este tipo de contenido.
  5. Llamativa es otra de las cláusulas relativa al material que tiene derechos de autor ¿Significa esto que el envío de fotografías –algo habitual en WhatsApp- de, por ejemplo, acontecimientos deportivos incumple sus normas? Según la multinacional sí, salvo que sean tuyas o dispongas del permiso correspondiente. En concreto, dicen sus responsables que “podemos cancelar tu cuenta si infringes repetidamente los derechos de propiedad intelectual de otras personas”.
  6. Otra de las conductas que pueden provocar la inhabilitación de tu presencia en la app del teléfono verde es que alteres de alguna manera su funcionamiento.

No obstante todo lo anterior, en las condiciones que fija WhatsApp, uno de los párrafos que se puede leer deja bien a las claras su total potestad:

Podemos modificar, suspender o terminar tu acceso a nuestros Servicios o tu uso de ellos en cualquier momento y por cualquier motivo, por ejemplo, si infringes la letra o el espíritu de nuestros Términos o provocas daños o riesgos, o realizas alguna acción que nos deje expuestos legalmente a nosotros, nuestros usuarios u otras personas. Las siguientes disposiciones perdurarán tras la terminación de tu relación con WhatsApp: "Licencias", "Descargos de responsabilidad", "Limitación de responsabilidad", "Indemnización", "Resolución de conflictos","Disponibilidad y Terminación de nuestros Servicios", "Otros" y "Disposición de arbitraje especial para los usuarios de los Estados Unidos o Canadá".

Por cierto ¿conoces a alguien a quién se haya cerrado su cuenta por alguno de los comportamientos descritos?