Fotografía facilitada por el Ministerio de Defensa de la llegada a Madrid del religioso Manuel García Viejo. EFE



Los militares que participaron en la repatriación de los dos misioneros enfermos de ébola se han sometido a dos revisiones diarias durante 21 días, qu es el periodo de riesgo, en cumplimiento con el protocolo de Defensa. Ninguno de ellos ha resultado infectado. Así lo ha explicado Pedro Morenés, ministro de Defensa, entrevistado por Pepa Bueno en la Cadena Ser. "Están perfectamente", y añadió que los controles a los que participaron en la repatriación de Pajares el pasado mes de agosto ya han finalizado sin dar ningún resultado positivo. Los que participaron en la de Manuel García Viejo superaran ese periodo de riesgo dentro de cuatro días y, hasta el momento, todo está correcto.

¿Por qué Defensa sí controló a los suyos y Sanidad los dejó abandonados a su suerte? Es más, el consejero de Sanidad de Madrid ha llegado a responsabilizar a la enfermera del contagio y la ha acusado de mentir. Esta misma mañana lo ha ratificado en la SER.

Llamadas de alerta ignoradas
El protocolo del ébola exige que los profesionales que hayan estado en contacto con los enfermos se tienen que someter a un especial seguimiento. Teresa Romero tuvo el último contacto con García Viejo el 26 de septiembre, cuando entró al limpiar la habitación del religioso. El día 30 llamó al servicio de Prevención Laboral de La Paz-Carlos III para informarles de que tenía fiebre pero la remitieron a su médico de cabecera. Hubo, al menos, una segunda llamada el día 2.

Seis días después es diagnosticada de ébola e ingresada en el Carlos III en régimen de aislamiento. Mientras tanto ha estado en contacto con numerosas personas, la mayoría se encuentran en observación y, afortunadamente ninguna ha dado positivo.

Traslado en una ambulancia normal
Los testimonios de estas personas demuestran cómo este asunto se les ha ido de las manos a las autoridades sanitarias, por mucho que se empeñe Ana Mato en decir que está todo bajo control. El conductor y el camillero que trasladaron a Teresa desde su domicilio hasta el Hospital de Alcorcón el pasado lunes alertaron a Sanidad de que la paciente decía tener ébola pero se tomó ninguna medida preventiva y fue trasladada en una ambulancia sin equipamento especial.

16 horas en el hospital de Alcorcón
El médico que la atendió en Alcorcón, que ingresó en observación ayer, ha denunciado por escrito los fallos de seguridad. Según este escrito, al que ha tenido acceso el diario El País, las mangas del traje de Seguridad le venían cortas. Teresa estuvo en el centro durante 16 horas y la enfermedad se fue manifestando progresivamente durante ese tiempo. A medida que se iba agravando su estado, el hospital fue improvisando un protocolo de seguridad. ¿Por qué tardaron tanto tiempo en tomar medidas y trasladarla al Carlos III? Una pregunta a la que todavía las autoridades sanitarias no han respondido.

Sin embargo, sí han apuntado a un fallo de la enfermera como posible causa de contagio. El consejero de Sanidad de Madrid lo ha hecho, además, con total falta de sensibilidad mientras desoye las denuncias del personal sanitario sobre los fallos de seguridad.

Ana Mato pone todos los medios
"Estamos poniendo todos los medios para evitar cualquier tipo de contagio", defendió ayer Ana Mato en el Congreso. ¿Está usted segura, señora Mato? Por el momento hay una persona infectada que lucha por su vida mientras tiene que soportar las andanadas de los políticos y ciertos medios, otras cinco ingresadas en observación y 84 (según relata El Mundo), sometidas a seguimiento desde su casa.