Tal y como los propios colaboradores decían al final de la primera emisión, este miércoles 15 de mayo: "No estábamos muertos, estábamos de parranda". Ni que fuéramos, el nuevo Sálvame de Canal Quickie, se estrenaba con éxito, acumulando casi 400.000 visualizaciones en solo tres horas durante su jornada de estreno. A lo largo del segundo programa, Kiko Matamoros ha estallado a gritos contra Mediaset España. 

El programa se emitirá de lunes a viernes de 16:00 horas a 19:00 horas y podrá seguirse, en directo, desde ElPlural.com, concretamente, desde la sección Todo TV.De esta manera, los lectores de este periódico, en conjunto con el público fiel del magacín, podrán seguir el minuto a minuto del programa a través del directo habilitado en nuestra web. Por otro lado, cabe destacar que también podrá consumirse la entrega del día anterior de este primer proyecto de Fabricantes Studio SL, liderado por Óscar Cornejo y Adrián Madrid, en el vertical Todo TV.

Como era de esperar, los colaboradores han vuelto a aprovechar su altavoz para cargar contra Telecinco. En este caso, Kiko Matamoros ha salido en defensa de su hija, Laura Matamoros, por su participación en Supervivientes 2024: "Lo que le afecta es la manipulación que han hecho con ella, el juego sucio y la utilización".

"¡Que no vuelva a un puñetero plató en el tiempo que pueda!", ha asegurado con visible enfado. A continuación, incluso le ha tenido que pedir que se calmase: "Os repito, parece mentira que seáis tan torpes con la de años que he trabajado con vosotros. ¡No voy a ir y me voy a callar muchas cosas que estoy viendo! Como estáis persistiendo en el juego, […] y lo diré aquí o donde lo tenga que decir. Si tenéis huevos, demandadme".

Las primeras audiencias del nuevo Sálvame

Sin llegar a alcanzar las 24 horas posteriores al estreno, el nuevo Sálvame ha alcanzado la friolera de 1.068.000 visualizaciones en lo relativo a las audiencias. En la mayoría de sus ventanas, a excepción de la cadena Atlántico Televisión, el programa ha arrasado en YouTube y Twitch (597.386), Instagram (440.900), TikTok (30.382), Tivify (42.000) y Zappi (50.000).

La primera entrega: una clara declaración de intenciones de lo que se viene

Un día antes de su estreno, el nuevo Sálvame se veía obligado a cambiar su nombre después de que Mediaset España solicitara a Fabricantes Studio SL que retirase el nombre de su primera producción. Sin embargo, lejos de tomárselo a la tremenda, el programa comenzaba una especie de mofa contra Telecinco, mandando a callar a todo el mundo al grito de "¡shhh!".

De esta manera, en lugar de pronunciar la palabra "sálvame", que formaba parte del "ni que fuéramos", los colaboradores realizaban un susurro habitualmente utilizado para mandar callar. Y esto es lo que parece que ha ocurrido realmente, ya que, Mediaset España les ha impedido incorporar esa palabra al tener registrada la marca Sálvame y, por lo tanto, es la propietaria de sus derechos.

Las alusiones a la cadena que vio nacer el formato original fueron continuas a lo largo de la emisión. Sin embargo, a lo largo de este primer programa, se tomaba la decisión de dejar de mencionar el nombre del grupo de comunicación para refererise a ella como "la cadena de enfrente", tal y como se lo comunicaba María Patiño a sus colaboradores en pleno directo. Este nombre no es casual, sino que es una referencia al término "la cadena triste", que se empleaba en Telecinco para referirse a Antena 3. 

Además, hace falta mencionar que las oficinas de Fabricantes Studio SL, lugar desde el que se emite diariamente Ni que fuéramos, se encuentra a escasos 350 metros de las instalaciones principales de Mediaset España en Madrid. En caso de que la sede de la productora estuviese orientada en la misma dirección, solo sería necesario asomarse a la terraza del plató de esta nueva versión de Sálvame para ver el edificio donde se graban los programas de Telecinco.

Dada la cercanía, el programa proponía un primer reto: si conseguían llegar a 200 suscriptores de pago en Twitch comenzarían su segunda emisión, la de este jueves 16 de mayo, frente a la instalaciones del grupo audiovisual. Y dicho y hecho, el salseo está garantizado, ya que, el conocido como Escaleto, confirmaba antes del final del programa que el objetivo se había cumplido. No obstante, la idea parecía no agradar a Belén Esteban: "¡A mí me parece una provocación! Yo no quiero ir a la puerta y tengo la libertad de decirlo", exclamaba. 

Sus palabras no sentaban bien a uno de sus compañeros más incisivos con Mediaset, Kiko Matamoros, que le reprochaba: "¡Pero por qué, qué problema tenemos!". "Yo acabo enchironado", añadía Víctor Sandoval. Por su parte, Lydia Lozano apostaba por el humor y aseguraba que "no quiere volver a ver al de Seguridad", haciendo alusión al incidente en la sede del grupo de comunicación en Fuencarral, cuando un trabajador se acercó a decirle que abandonara las inmediaciones cuando grababa la promoción de Ni que fuéramos. 

Puedes ver Ni que fuéramos, el nuevo Sálvame, en directo de lunes a viernes en Todo TV | ElPlural.com

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