María Abradelo se enfadó este viernes en TardeAR por el rótulo con la que la recibieron en plató. Abradelo acudió al programa para hablar sobre su experiencia en el programa de TVE Un, dos, tres en el que hizo de azafata. Pero, más concretamente, acudió a ese espacio para hablar de Chicho Ibáñez Serrador, el director del programa.
El equipo de Tardear había contactado con ella para saber si compartía la misma postura que otra de las azafatas, Marta de Pablo con respecto al famoso realizador. Abradelo guarda un recuerdo muy distinto del de su compañera, la cual acusa al realizador de humillarla durante las grabaciones.
Tardear pretendía enfrentar las opiniones de las azafatas bajo el rótulo: "Duelo de azafatas del Un, dos, tres", el cual María Abradelo pidió que se retirara nada más incorporarse a la tertulia. “No puedo mentir porque no soy una persona cínica. Me van a ver un poco revenida o quemada”, advirtió ante la sorpresa de quienes la acompañaban en el plató.
“A mí me hicisteis una entrevista ayer y me propusisteis venir a hablar de Chicho. Yo no he venido a una guerra ni a contraatacar. No es mi estilo, nunca lo he hecho y no lo haré porque no tengo necesidad de hacerlo”, defendió.
Verónica Dulanto, la presentadora del programa, no dudó en intervenir para aclarar que el programa no había diseñado una "encerrona". Sin embargo, estas palabras no convencieron a la entrevistada. “Ni a mi representante ni a mí nos habéis avisado. Me sabe fatal, así que vamos a tener buen rollo y paz”, añadió mientras elogiaba al público del programa para “correr un tupido velo”.
“Yo no he venido a ninguna guerra”, insistió Abradelo, molesta con el enfoque que se le había dado a su entrevista y con la posibilidad de que luego tuviera que enfrentarse a Marta de Pablo. Frank Blanco, el presentador recalcó: "Ha sido un malentendido".
La respuesta de la invitada fue contundente, pues estaba en total desacuerdo: “Malentendido, no –apostilló la invitada–. Malentendido es cuando alguna de las partes no entiende lo que se ha comentado, pero a nosotros no nos han dicho eso”, prosiguió.
Pese a todo, Abradelo entendió que Tardear utilizara el término "guerra de azafatas" para enganchar a la audiencia. Sin embargo, no se mostró de acuerdo con la estrategia utilizada por parte del programa y siguió recalcando que ese no es su estilo y que nunca ha buscado "airear" su vida personal en televisión.
“Es una licencia literaria, es una forma de vender”, justificó Frank Blanco, mientras subía el tono de la discusión. En ese momento se escuchó un grito que provenía de detrás de las cámaras ante el que los periodistas y la propia invitada se quedaron asombrados. Tras esto, la discusión finalizó entre disculpas por ambas partes.