Corren tiempos en los que los derechos no sólo laborales, sino simplemente los humanos están bajo escrutinio. La crisis, que se desencadenó por la avaricia de los mercados financieros, vale para todos los recortes. El último que se ha puesto en escrutinio es el de los días libres que se toman por fallecimiento de un familiar directo.

Como les contábamos en este periódico, la 'ocurrencia' inicial la tuvo José de la Cavada, director de Relaciones Laborales de la CEOE. Decía este señor que el permiso por defunción  de cuatro días “se hizo pensando que los viajes se hacen en diligencia, como en las películas de John Ford. Se dan cuatro días para un permiso por defunción que, evidentemente, con los vehículos que hay ahora, se trata de horas de desplazamiento, o a veces de una hora”.

La 'ocurrencia' ha sido muy comentada. Mucha gente incluso se ha mostrado comprensiva con él y su 'pensamiento'. Pero pocos se han sentido tan identificados con el directivo de la patronal como el director de La Razón, que en cuanto se trata de hablar de derechos laborales se pone a cien.

Esta mañana en la tertulia de la COPE sacó el tema Ernesto Saéz de Buruaga. Y a Maruhuenda, no olvidemos que fue director de Gabinete de Mariano Rajoy, se le calentó de inmediato la boca. Comenzó por plantear que habría que aclarar qué se entiende por "allegado". Para a continuación pasar a apuntar que en este país en seguida nos tiramos "al cachondeo", porque confundimos los derechos, y pensamos que no conllevan obligaciones. Y es que aquí, ha venido a decir, lo que nos va es que "la juerga la paguen las empresas y el Estado". Y ha rematado con un pensamiento más profundo: Europa es cada vez menos competitiva, porque tenemos una política escandalosa de "absentismo laboral".

Y se ha quedado tan fresco. Los que le escuchaban andaban pasamados. Como será la cosa que incluso Buruaga ha tenido que recordar que "no todo el mundo puede viajar en avión o en AVE".