El patrón del buque pesquero Villa de Pitanxo, Juan Padín, no sólo ha mantenido que el hundimiento del barco en el que fallecieron 21 marineros frente a Terranova (Canadá) fue un accidente, sino que si estos no llevaban puestos los trajes térmicos que podrían haberles salvado la vida, evitando la hipotermia, es porque era una cuestión de responsabilidad individual y que podría ser porque "estaban en shock", pero que no sabe porqué fue, ya que según su declaración sí dio la orden de ponerselos.

Una versión que contrasta, y mucho, con la del superviviente ghanés, Samuel Koufie, quien ha relatado cómo el capitán se negó a soltar el aparejo del barco que lo lastraba, provocando que se escorara a babor y, debido a la entrada de agua, un fallo del motor que terminó con el hundimiento del pesquero que faenaba en Terranova. Kawesi taqmbién ha declarado que el capitán no dio la orden de ponerse los trajes térmicos.

Además de las declaraciones por el presunto delito de 21 homicidios por imprudencia y de otros 21 delitos contra la salud de los trabajadores, las partes han solicitado medidas cautelares. Varias acusaciones y la Fiscalía han pedido la retirada del pasaporte y comparecencia quincenal del patrón del barco, mientras que otra acusación ha ido más allá y ha solicitado al magistrado de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, arresto domiciliario. Finalmente, el juez ha decretado comparecencia cada 15 días, obligación de comunicar el cambio de domicilio y retirada del pasaporte. El incumplimiento podría suponer la prisión provisional.

Las fuentes consultadas han explicado que el tercero en discordia, Eduardo Rial, sobrino del patrón, ha secundado la versión de su tío. Eso sí, dicen las fuentes que entrando en diversas contradicciones lo que ha conllevado que el juez le riñera en varias ocasiones.

El naufragio del Villa de Pitanxo se produjo el 15 de febrero de este año cuando el barco se hundió mientras faenaba frente a las costas de Terranova en Canadá. De los 24 marineros que iban a bordo, solo tres lograron sobrevivir. El resto murieron, o bien ahogados, o bien debido a la hipotermia que sufrieron al no llevar puestos los trajes térmicos que podrían haber salvado sus vidas, pues varios de ellos estaban a bordo de una barca que hacía aguas. De hecho, en esa barca iban el marinero ghanés, el capitán y su sobrino, los únicos tres tripulantes que lograron salvar la vida.

El relato de Samuel Kawesi de cómo sus compañeros iban muriendo de hipotermia e iban cayendo a la mar uno a uno es absolutamente escalofriante. Durante la declaración se ha preguntado al patrón por una segunda barca, que iba vacía. Según las fuentes presenciales Juan Padín no ha sabido contestar a porqué no subió ningún marinero en ella.