La magistrada instructora del conocido como caso Vinicius ha citado, el próximo 23 de noviembre, al jugador del Real Madrid, Eder Militao, en calidad de perjudicado. La juez ha tomado esta decisión después de que a dirección letrada de LaLiga ampliara la denuncia aduciendo que el jugador también fue objeto de expresiones vejatorias de carácter racista en el campo de Mestalla en el encuentro entre el club blanco y el Valencia CF.

Este jueves ha acudido a los juzgados de Plaza de Castilla Vinicius para declarar sobre lo sucedido en Mestalla. El jugador no ha querido realizar declaraciones a su entrada en la sede judicial. Vinicius declara sobre los insultos recistas como "mono" que varios aficionados che le profirieron desde la grada. Unos insultos que dieron la vuelta al mundo y generaron un rechazo total a nivel planetario.

Noticia mundial

No es la primera ni será la última vez que se han visto insultos racistas en un campo de fútbol. Pero lo sucedido en Mestalla conviryió a liga española en el epicentro mediático mundial por el enésimo espectáculo racista. Esta vez -una más- contra el jugador del Real Madrid Vinicius Júnior.

Antes y durante el partido que el club blanco disputaba en Mestalla contra el Valencia, aficionados del conjunto che insultaron al extremo zurdo merengue con gritos de “eres un mono” o emulando el sonido de un primate. Un capítulo más en una temporada plagada de actos similares, con la salvedad de que, en esta ocasión, el globo en su totalidad ha posado los ojos sobre España para mostrar su solidaridad con el internacional brasileño, desde el presidente de su país, Luis Inazio Lula da Silva, hasta los medios de comunicación de todo el planeta. El torneo que dirige Javier Tebas está bajo sospecha.

La Fiscalía

La fiscal del caso ViniciusSusana Gisbert, fiscal especializada en violencia de género y fiscal delegada de Delitos de Odio, es tajante ante los actos racistas, sean de índole que sean, “es intolerable cualquier acto racista”. Gisbert, la persona encargada de investigar lo sucedido en Mestalla, también afirma que “tenemos que investigar qué ha pasado en en campo”, ya que, como el propio club afirmó, la Policía Nacional identificó a varios aficionados, ahora investigados como los presuntos autores de los insultos racistas.

Sin embargo, Gisbert afirma: “Al Ministerio Fiscal, como garante de la legalidad, le es absolutamente indiferente que se trate de un equipo de primera división o de la más humilde de las categorías, al igual que le es indiferente que se trate de fútbol masculino o de un deporte minoritario. Nuestra obligación como profesionales de la justicia es perseguir cualquier infracción penal más allá de todos estos condicionamientos por completo ajenos a nuestra función. Pero, por desgracia el fútbol se está convirtiendo en un exponente del racismo que existe en nuestra sociedad.

Tras iniciarse la investigación Gisbert también afirmó que: “Aunque es pronto para pronunciarse jurídicamente, la clave en este y en cualquier otro caso de similares características está en dos parámetros: de un lado, que los cánticos, además de ser racistas, inciten al odio y, de otra, que los actos supongan una humillación a persona determinada por uno de los motivos que dan lugar a discriminación, el racismo, en este caso. Habrá que esperar si hay denuncia de una persona determinada y si se considera que entraña humillación para decidir si nos encontramos ante uno o dos tipos penales, siempre y cuando, por descontado, que se haya identificado el autor o autores”. De las palabras de la fiscal se desprende la importancia de la declaración del jugador, ya que las penas varían dependiendo si Vinicius se ha sentido ofendido o no.