José Antonio Mora Alarcón, el magistrado presidente del juicio del caso Gürtel que está juzgando al expresidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, ha cesado en su puesto, tal y como se publicó en el BOE del martes 6 de junio, ya que ha concursado a la Audiencia Provincial de Valencia. Sin embargo, Mora Alarcón continuará como presidente y ponente del juicio hasta que firme la sentencia gracias a un acuerdo adoptado por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

Este acuerdo se ha tomado porque, de no haber firmado el CGPJ ese extremo, Mora Alarcón se debería haber marchado a Valencia, lo que hubiera obligado a la Sección Segunda de Lo Penal de la Audiencia Nacional a repetir el juicio a Camps por los presuntos amaños de contratos en Fitur con la trama corrupta. Un juicio que ya lleva en marcha varios meses. En un principio, y si la huelga de funcionarios no lo impide, el juez estará en Madrid hasta noviembre o diciembre de este año. Una vez firme la sentencia, se convocará la plaza que dejará libre Mora Alarcón.

Acuerdo de la Sala

La duda que se ha suscitado en la Audiencia Nacional es qué puede o no puede hacer el magistrado además del juicio de Gürtel. Según las fuentes consultadas por ElPlural.com en la audiencia previsiblemente se firmará un acuerdo de la Sala de lo Penal para que José Antonio Mora Alarcón pueda resolver autos de causas que ya están abiertas en la Sección Segunda, lo cual descargará de trabajo a sus compañeros, puesto que, hasta que no se incorpore en la Audiencia Provincial de Valencia, su plaza en la Nacional no saldrá a concurso, pero el trabajo se sigue acumulando en la Sección Segunda.

Si el acuerdo es en estos términos, José Antonio Mora Alarcón no podrá coger ninguna causa nueva, lo que le deja, de facto, fuera de cualquier juicio que se señale a partir de ahora. Esto no es baladí, pues esta sección tiene previsto poner fecha de inicio al primer juicio sobre el caso Lezo.

Juicio de Gürtel

Tras la publicación en el BOE de su cese, el caso Gürtel queda como el último gran macrojuicio que celebrará Mora Alarcón en la Audiencia Nacional. Este juicio, además, es en el que el expresidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, se enfrenta en la Audiencia Nacional a la última causa judicial que le queda abierta, la pieza que juzga el presunto amaño del contrato de un stand de Fitur que se adjudicó a la trama Gürtel, que costó 366.529 euros a los valencianos, y que se pagó mediante contratos menores. También ha sido el primer juicio en el que el expresidente se ha enfrentado, cara a cara, a su “amiguito del alma” Álvaro Pérez ‘El bigotes’.

El que fuera jefe del Ejecutivo valenciano no estaba imputado en esta causa, pero tras un gran trabajo de la fiscal Anticorrupción Miriam Segura, que consiguió un rosario de conformidades en la pieza de la ‘caja B’ del PP valenciano, el caso, que estaba a falta de fecha para juicio, volvió al Jugado Central de Instrucción Número 5 de la Audiencia Nacional y se imputó y procesó a Camps.

Según el magistrado instructor, la Fiscalía y las acusaciones particulares, Francisco Camps fue la persona que dio la orden a la entonces directora general de Promoción Institucional Dora Ibars de favorecer con los contratos a la empresa del grupo Correa, Orange Market.

La fiscal Segura logró que, la antaño mano derecha en el partido de Camps, el exsecretario general del PP valenciano Ricardo Costa apuntara al expresidente. La demoledora declaración de Costa, junto que la no menos brutal declaración de Álvaro Pérez, fueron la piedra angular de la decisión de llevar a Francisco Camps ante la Justicia.