Con la llegada de la primavera a España, después de un largo periodo de borrascas, el tiempo parece comenzar a estabilizarse. Sin embargo, según los meteorólogos, todavía queda un resquicio de incertidumbre antes de que los días soleados y agradables se asienten por completo. En este sentido, los expertos ya han comenzado a analizar las previsiones para la Semana Santa, que en este 2025 coincide con la semana del 14 al 20 de abril, y alertan sobre varios factores climáticos que podrían afectar las celebraciones, viajes y vacaciones.
El meteorólogo Samuel Biener, de Meteored, ha indicado que la Semana Santa podría estar "en riesgo" debido a tres fenómenos meteorológicos clave. En primer lugar, ha señalado la posibilidad de lluvias, que se presentarán principalmente como precipitaciones frontales o convectivas. Estas lluvias, que suelen ser chaparrones irregulares, son comunes a mediados de abril y podrían interrumpir la estabilidad del tiempo durante esos días festivos.
La Semana Santa, amenazada
En segundo lugar, Biener ha mencionado las tormentas, otro fenómeno característico de la temporada primaveral. Las tormentas son especialmente esperadas en zonas del interior y en áreas de montaña, donde las condiciones meteorológicas son más propensas a generar este tipo de eventos. Históricamente, la Semana Santa suele coincidir con un aumento en la actividad tormentosa, por lo que los viajeros deben estar preparados para posibles alteraciones en el tiempo, sobre todo si tienen planes en el interior del país o en zonas de alta montaña.
Finalmente, el meteorólogo ha alertado sobre el viento, que puede ser otro factor a tener en cuenta en la previsión para la Semana Santa. A mediados de primavera, las condiciones atmosféricas pueden ser más inestables, lo que facilita la formación rápida de borrascas. Además, las rachas de viento pueden ser de gran intensidad, lo que representa un riesgo adicional para las actividades al aire libre, especialmente en las regiones más expuestas.
Pronóstico reservado
Por su parte, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) también ha ofrecido su pronóstico general para la segunda mitad de abril, aunque con cierta prudencia. En su último informe, señala que las temperaturas para la Semana Santa podrían situarse por debajo de lo habitual para esta época del año, lo que indicaría un clima más fresco de lo esperado. Además, las lluvias podrían ser superiores a la media en estas fechas, lo que confirma las advertencias de los meteorólogos sobre un tiempo más inestable durante los días festivos.
Aunque la previsión a largo plazo siempre tiene cierto grado de incertidumbre, los expertos coinciden en que es importante estar preparados para un clima variable durante la Semana Santa de 2025. Las lluvias, las tormentas y el viento podrían condicionar las procesiones, los viajes o incluso cualquier otro plan, por lo que se recomienda seguir de cerca las actualizaciones meteorológicas conforme se acerquen esas fechas.