A medida que avanzan los días, cada vez más personas construyen una sólida barrera frente al coronavirus gracias a la vacunación. La sanidad española continúa cumpliendo hitos, ya que se han superado los más de 13 millones de inmunizados con la pauta completa y más de 22 millones con una dosis.

Este escenario ya permite que se planteen nuevos debates en la ciudadanía y, por ende, en el seno del Gobierno. La medida que podría empezar a relajarse de cara a este verano es el uso de mascarillas en exteriores, un complemento que la pandemia autoimpuso a nivel mundial para prevenir el contagio y que pronto se convirtió en indispensable para salir a la calle o mantener relaciones sociales.

Ante la necesidad de los españoles de empezar a desprenderse de las mascarillas y volver a la "nueva normalidad" ya son muchos dirigentes políticos y sanitarios los que se han sumado a esta relajación paulatina. El primero de ellos fue Fernando Simón que, al ser preguntado en varias ocasiones por esta cuestión, no descartó que se produjese en el mes de julio, aunque esta dependa de un marco legal y suponga un proceso más lento del deseado.

Este lunes, el director del CCAES advertía que esta medida podría darse antes de julio en espacios abiertos, pero no en otros ámbitos: "Ahora mismo todavía considero que en los interiores es muy necesario. Tenemos que entender todos que esto es una evolución progresiva", explicaba en una rueda de prensa.

Por otra parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaba este miércoles que "pronto" dejarán de ser obligatorias las mascarillas en exteriores. "En unos días vamos a tener más de 15 millones de personas con pauta completa y en unas semanas, el 50% de la población al menos con una dosis”, aludiendo así a la "velocidad de crucero" que toma la vacunación en España.

Asimismo, el Ministerio de Sanidad, en representación de Carolina Darias, sostiene la misma postura que el jefe del Ejecutivo. "Pronto daremos información, esta medida ha supuesto un antes y un después en nuestras vidas como consecuencia de la pandemia", aseguraba ante los medios tras la reunión con las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial de Salud. "Será una iniciativa acorde al marco legal y en coordinación con las comunidades autónomas", insistía Darias.

Dentro del ámbito europeo, ya varios los países que han empezado a poner en práctica esta medida. El ejemplo más cercano puede apreciarse en Francia, donde se elimina a partir de este jueves la obligatoriedad de llevarla en la calle, aunque seguirá siendo primordial su uso en circunstancias concretas como espacios cerrados o lugares exteriores muy concurridos.