El patrimonio heredado de la familia directa de Luis Medina esconde un valor artístico e histórico sin precedentes. Entre sus pertenencias se encuentran destacadas reliquias y obras artísticas de renombre que han pasado de generación en generación durante años.

La familia Medinaceli ostenta en su poder una de las colecciones de arte más importantes de Europa, ya que tienen desde cuadros pictóricos y esculturas hasta inmuebles de un incomparable valor histórico. Entre los más destacados se encuentran seis obras de El Greco, La Piedad del italiano Sebastiano il Piombo, La mujer barbuda o Magdalena Ventura con su marido de José de Ribera y San Juan Bautista de niño, única escultura del reconocido Miguel Ángel que se encuentra en manos privadas.

En relación con sus propiedades, se encuentra la Capilla del Salvador de Úbeda (Jaén), la cual es una atracción de la ciudad muy frecuentada por turistas; el Pazo de Oca (Pontevedra), el cual está reconocido como Bien de Interés Cultural del patrimonio español; la Casa de Pilatos (Sevilla), en el que confluyen el estilo mudéjar y el renacentista combinado con coloridos azulejos y amplios jardines; y el Hospital Tavera u Hospital de San Juan Bautista (Toledo), donde en su interior se encuentra un museo con numerosos archivos de documentos antiguos y multitud de obras de Tintoretto, Tiziano o Zurbarán, entre otros.

Herencia millonaria en la familia Medinaceli

El empresario que habría sido el principal actor de las contrataciones millonarias de mascarillas por el que se ha visto salpicado el Ayuntamiento de Madrid de José Luis Martínez-Almeida, es marqués de Villalba, nieto de Mimi Medinaceli y sobrino de Ignacio de Medina y Fernández de Córdoba, presidente de la Fundación de la casa nobiliaria y duque de Segorbe.

Los nietos tuvieron que llevar el reparto de la herencia ante la justicia al no llegar a un acuerdo con la Fundación Medinaceli tras el fallecimiento de la aristócrata en 2013, aunque el Ignacio Medina se negó a ello llegando a vender cuatro de los cuadros del patrimonio familiar, contradiciendo así la última palabra de Mimi Medinaceli.

Según adelantó el diario ABC, el Juzgado de Primera Instancia número 12 de Sevilla dio la razón a los nietos permitiendo que reciban 4,2 millones de euros y, en el caso de los bisnietos, 1,4 millones, tal y como estipulaba el testamento de Mimi Medinaceli. Una cuantía que asciende a 20 millones de euros, aunque la cifra podría haber ascendido aún más si los demandantes no hubiesen aceptado los cálculos del mediador en el patrimonio familiar, ya que el valor es prácticamente incalculable.