El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha puesto en marcha dos nuevas señales de tráfico en las carreteras que por ahora forman parte de un experimento para probar su eficacia y el grado de percepción y comprensión por parte de los conductores. Las nuevas marcas se han pintado sobre el asfalto en la travesía de Nava de Roa (Burgos) en la N-122, entre los km 293 y 294.

En el inicio de la travesía se dispondrá de una nueva marca vial denominada “dientes de dragón”, que obligará al conductor a reducir  la velocidad de circulación con respecto al tramo precedente, debiendo, a la vez, adaptar la conducción a las nuevas circunstancias del entorno de la carretera. Por otro lado, se dispondrá de un paso de cebra en la zona con más visibilidad, al que precederán “líneas de borde quebradas”, cuyo objetivo es concienciar al conductor de que se aproxima a una sección particular, por lo que deberá reducir la velocidad.

“La percepción que se tiene de las marcas viales cuando se circula por la carretera es muy distinta de la obtenida en el diseño en papel. Además, la interpretación por parte de cada usuario es muy subjetiva”, señala el ministerio, que inicia este experimento con el "objetivo de comprobar previamente a la incorporación a la nueva normativa la eficacia de las marcas y el grado de percepción y comprensión por parte de los usuarios”, según explica en su cuenta de Twitter.