Numerosos son los obstáculos que a diario salvan con heroicidad las personas con diversidad funcional en el Metro de Madrid. La movilidad es todo un reto que afrontan a diario, y Metro no pone las cosas precisamente fáciles.
En los últimos días, la red de ferrocarril metropolitana ha añadido a su particular yincana un obstáculo más que dificulta enormemente los desplazamientos a los invidentes. Y es que, en varias líneas de Metro el sonido de aviso del nombre de las paradas no se corresponde con la estación en cuestión.
Así, según ha podido confirmar este periódico, en la Línea 8 a la altura de Colombia se ha podido escuchar: “Próxima estación, Begoña”, cuando dicha parada forma parte de la Línea 10, no de la ocho.
Y no es el único caso. En la línea 10 existe una dislocación espacio-temporal. Al llegar a Nuevos Ministerios, uno de los trenes informó de que la parada era “Santiago Bernabéu”, que es la siguiente a la estación en cuestión.
Estos avisos por megafonía que se pueden escuchar dentro del propio vagón no solo pueden conducir a equívoco a cualquier persona; sino que además, suponen un problema severo para invidentes que requieren de los avisos sonoros para informarse de las estaciones.
Metro de Madrid está al tanto de la problemática. Un usuario de Twitter advirtió de la anomalía a la empresa, y ésta se ha limitado a pedir que se anote el número de coche para “pasarnos el aviso”.
Esta circunstancia se da en pleno anuncio del vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, de que prevé abrir Metro hasta las 02:30 horas los fines de semana en el año 2020. El objetivo sería poder abrir de manera progresiva las 24 horas.
La ampliación de hora y media los viernes y sábados será la primera de tres frases, que se realizarán de manera progresiva por franjas horarias, y servirá para saber cuándo y cómo se avanza con el resto de la medida. Esto tendrá un coste de 9 millones de euros y beneficiará a 1,1 millones de personas al año.
En la segunda fase, con que costará 14 millones, se adelantará el horario de apertura desde las 6 hasta las 5 horas, lo que llegará hasta más de 2 millones de madrileños. En la tercera se abrirá completamente y se beneficiarán 3,5 millones de personas. El coste total de la medida no alcanzará los 40 millones.
