La Semana Santa ha resultado especialmente trágica para los padres de Erick, un niño de cinco años que el pasado sábado fallecía en la localidad de Alovera (Guadalajara). El final menos deseado ocurrió después de que el pequeño cayera a la piscina cubierta climatizada municipal de Azuqueca de Henares, en Castilla-La Mancha.

La sucesión de lo ocurrido comenzó el pasado 1 de abril, alrededor de las 12:45 horas del mediodía. En aquel momento, el menor se encontraba haciendo un cursillo de natación en las instalaciones de la piscina cubierta municipal cuando terminó cayendo al fondo del vaso de la misma por causas todavía desconocidas.

Erick fue rescatado en seguida por los equipos allí presentes, encontrándose inconsciente en el momento de la intervención. Los monitores de la piscina le realizaron la maniobra de realización cardiopulmonar (conocida como RCP) hasta que se personaron en el lugar los servicios de emergencia sanitarios, según adelantaba el periódico local El Heraldo de Henares.

El equipo desplazado hasta el lugar constaba con una UVI móvil y agentes de la Policía Local, así como la Guardia Civil de Azuqueca, siendo todos ellos los que continuaron con las maniobras, llegando a aplicar un desfibrilador sobre el cuerpo, por aquel se creía que probablemente con vida, del pequeño.

Acto seguido, Erick fue trasladado en helicóptero al Hospital Universitario de Toledo cuando aún no se conocía el diagnóstico. La peor de las noticias terminó de llegar con el pequeño ya dentro del edificio, siendo éste el momento exacto en el que murió.

Los padres de Erick agradecen el apoyo

Los padres de Erick no dan crédito a un hecho siempre trágico pero, en este caso, además inesperado por la manera en la que ocurría. El matrimonio ha redactado un comunicado del que se ha hecho eco el Ayuntamiento de Alovera, municipio en el que residía la familia. En el texto que ha dado a conocer el Consistorio los padres han mostrado el agradecimiento por el apoyo y el cariño recibido desde aquel día, habida cuenta de que éstos no han dejado de llegar desde entonces.

“Pese a la dureza de todo lo vivido, queremos sacar un poco de entereza para trasladar con estas palabras nuestro más sincero agradecimiento a todos los que estos días nos estáis transmitiendo vuestro cariño y fuerza para poder seguir adelante”, estiman en primera instancia para añadir después: “Nuestro pequeño Erick nos dejó de una forma que no logramos de comprender y todos nuestros pensamientos han estado reservados para despedirle como se merece”.

Asimismo, dan las gracias porque han recibido “muchísimo calor y amor de personas del pueblo de Alovera y de personas que, desde otros muchos lugares, se han unido por la pérdida de nuestro pequeño, haciendo que el recuerdo de su inocente presencia se mantenga por siempre en nosotros”. “Aunque no podamos devolver cercanía a todos los que estáis sufriendo también este duelo por los momentos compartidos en vida con Erick, de corazón nos enorgullece comprobar la bella huella que dejó”, apostillan en un comunicado que cierra de la siguiente manera: “Queremos dar las gracias, uno a uno, a todos los que nos habéis ayudado con vuestras muestras de cariño y a todos aquellos profesionales que pusieron todo su cuerpo y alma para que nuestro pequeño pudiera salir adelante”.

Además de los cuerpos de emergencia, el Ayuntamiento de Alovera ha trasladado en los últimos días su más sincero pésame a la familia del menor, cuya evolución, reconocen “seguíamos con esperanza” hasta que se les comunicaba que “nos ha dejado tras un accidente en la piscina cubierta de Azuqueca”. “Dese el ayuntamiento hemos trasladado a la familia las condolencias y todo el apoyo”, añadían. La web y el perfil del Ayuntamiento subió a sus redes un lazo negro en señal de luto con el siguiente mensaje: “Desde el Ayuntamiento nos unimos al dolor de la familia y allegados tras conocerse el fallecimiento del menor aloverano de 5 años, que sufrió un accidente en la piscina cubierta de Azuqueca”. El propio edificio principal, así como varios allegados del menor, han depositado una corona de flores y otros recuerdos en honor al pequeño mientras siguen llegando muestras de respeto y cariño tras el trágico suceso.

Las autoridades continúan trabajando para esclarecer los hechos de lo ocurrido y que no vuelva a ocurrir nada parecido. Mientras tanto, y durante los festivos de Semana Santa, la localidad castellanomanchega ha guardado el luto por el fallecimiento de Erick, del que se cumplen una semana en el momento de redacción de estas líneas.