Los hechos han conmocionado al barrio zaragozano de Universidad. El pasado 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, a las 7:00 horas, perdía la vida Nadia, de tan solo 20 años, tras encadenarse un dramático suceso.

La joven caía desde un cuarto piso cuando trataba de entrar a su vivienda por la ventana. Se había dejado las llaves y lejos de llamar a un cerrajero o buscar otra solución, decidió optar por el peor de los remedios: intentar entrar por la ventana.

La joven, que residía en el número 1 de la calle Luis Galve, optó por trepar al no encontrarse su novia en el domicilio y haber llamado al portero automático de un vecino para pedirle poder entrar. En concreto, según informa ‘El Heraldo’, decidió emplear una de las ventanas que dan al patio de luces para así encaramarse al alféizar de su casa, en un cuarto piso. Pretendía así valerse de la tubería de gas que recorre este espacio.

“Sin embargo perdió el equilibrio y cayó al vacío. Fue una vecina del piso principal la que escuchó un fuerte estruendo que le despertó y salió a su terraza observando a Nadia ya cadáver. Llamó a la sala del 112 SOS Aragón para pedir ayuda, pero los sanitarios sólo pudieron certificar su muerte”.

De hecho, el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón, que se trasladó al lugar del fatídico suceso, certificó que no se trataba de un suicidio sino de un accidente.

“Una de sus zapatillas estaba enganchada en la tubería que pretendía emplear para entrar por la ventana”.