En las últimas semanas, la Guardia Civil ha alertado nuevamente de una estafa que está circulando como la pólvora por los teléfonos móviles. De hecho, lleva haciéndolo desde 2020, cuando las autoridades ya advirtieron de este timo, que ahora vuelve a ser altamente preocupante por la cantidad de personas que están cayendo en él.

Como motivo de ello, la Guardia Civil ha puesto el acento en los prefijos telefónicos correspondientes a otros países y a los que, dicho por ellos mismos, ninguna persona debe obedecer. De lo contrario, quienes piquen pagarán más en su factura telefónica. El hecho, por razones obvias, ha sido calificado por las autoridades como el timo de la llamada perdida.

Los prefijos a los que no se debe hacer caso

En concreto, los prefijos sobre los que se han centrado los cuerpos de seguridad son los siguientes:

  • Albania (355)
  • Costa de Marfil (225)
  • Ghana (233)
  • Nigeria (234)

El procedimiento llevado a cabo por los estafadores es siempre el mismo. El usuario recibe una llamada sospechosa y la devuelve. En este momento se le cobra una tarifa alta de la que los delincuentes se llevan una parte.

Huir de números sospechosos

La Policía Nacional va más allá del aviso de sus compañeros y emplaza a aquellos que reciban una llamada de estas características a huir de ella. Es decir, hacerle caso omiso; y es que aunque no sean los prefijos aquí mencionados también pueden obedecer al timo de la perdida.

Cuánto cuesta el 'timo de la perdida'

El coste económico que tiene caer en esta estafa no dispone de una cantidad exacta, ya que depende de varios factores como el tiempo de esta.

Con todo, el coste es de 1,20 euros el minuto una vez que se devuelve la llamada, ya que es en ese momento en el que se deriva la mima a una tarifa de bonificación especial. A dicha cantidad hay que sumarle lo que el mero establecimiento de la llamada supone al usuario y que ronda los cuatro o cinco euros.

Caer no es tan difícil, y aunque hay algunos matices que permiten ver la estafa – por ejemplo, números más largos que normalmente empiezan por 2-  es sencillo que esta sea fructífera para quien la realiza. Por eso, la Policía aconseja no atender números sospechosos e, incluso,  bloquear el contacto para que no vuelva a actuar.