El Gobierno vasco se ha fijado como meta alcanzar los 60 casos de coronavirus por 100.000 habitantes para suavizar las medidas de restricción de actividades y aforos impuestas para luchar contra la pandemia.
Esa condición está incluida en el plan 'Bizi Berri II', que marca las directrices básicas que seguirá el Gobierno de Iñigo Urkullu para atajar la expansión del Covid-19 y se basa en las consideraciones del Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC), que estima que los países que mantienen una tasa de incidencia acumulada en 14 días por encima de 60 casos por 100.000 habitantes se encuentran en una situación preocupante.
En Euskadi ha habido un nuevo descenso en el número de positivos. Este domingo se detectaron 318 casos en las 8.227 pruebas PCR efectuadas. Son 124 menos que el viernes, cuando salieron a la luz 442 nuevos casos en 8.579 PCR, según los datos ofrecidos por Osakidetza. Además de que se han reducido en algo más de una cuarta parte, también supone que no llegan a cuatro las personas contagiadas por cada cien test realizados, una menos que en los días anteriores, según datos del Diario Vasco.
Volver a las cifras de julio
El reto de llegar a 60 casos por 100.000 habitantes significaría regresar a los parámetros que tenía la comunidad autónoma en el pasado 23 de julio, con 136 casos en todo el País Vasco. Los positivos registrados en Gipuzkoa fueron 35 y preocupaba especialmente la situación de Eibar, donde en siete días se habían producido un centenar de casos. En aquellos momentos las fiestas estudiantiles tras los exámenes de Selectividad se habían convertido en una vía de propagación del virus.
El Departamento de Salud considera que se ha conseguido frenar la progresión de la epidemia, pero advierte de un estancamiento en los últimos días. Los autores de 'Bizi Berri II' cifran en 95 los casos diarios que serían deseables en el actual momento epidemiológico para mantener controlada la situación. Recuerdan en este sentido que de mantenerse la tendencia actual se podría llegar a esta cifra en un plazo de seis a ocho semanas.
