Hace dos años se conoció que el concursante de GH Revolution, José María López, cometió, presuntamente, “abuso sexual con penetración” hacia Carlota Prado, su pareja por aquel momento. La también participante del reality lo denunció y, ahora, el supuesto agresor está a un paso de sentarse en el banquillo.
La magistrada que enjuicia el caso ha concluido la instrucción y en el auto se deslizan indicios de abuso sexual. La jueza de Colmenar Viejo sostiene que él era plenamente consciente de lo acontecido mientras la joven se encontraba en un evidente estado de embriaguez. Un vídeo aportado por la dirección de Gran Hermano ha resultado clave en este aspecto.
El escrito de la jueza recoge que José María perpetró varios movimientos bajo el edredón que “aparentemente pudieran consistir en penetraciones” y, por tanto, podría enfrentarse a un delito de abuso sexual que puede desembocar en una pena de uno a tres años de prisión. El abogado defensor mantiene la inocencia del exconcursante.
Después de dos años desde la denuncia, Carlota Prado comienza a ver la luz al final del túnel. Varios meses atrás lamentaba la lentitud de la justicia, pues aún se mantenía a la espera de conocer la fecha del juicio a la par que soportaba una “lluvia de amenazas, insultos y vejaciones” hacia su persona.
La magistrada, que dio por concluida la instrucción el pasado mes de diciembre, se encuentra a la espera de que las partes acusen al exconcursante de Gran Hermano antes de desfilar por el banquillo para que sea juzgado.
La defensa recurrió el escrito, pero la Audiencia Provincial de Madrid respaldó la decisión el pasado mes de julio. La magistrada sostuvo que existen “indicios” de que la conducta de José María “pudiera ser constitutiva de un delito de abuso sexual”. Así se desliza en el auto, pues Carlota se hallaba tumbada sin poder moverse, “con los ojos cerrados desde que se metió en la cama”.
Entonces, José María realizó una serie de movimientos bajo el ordenador que podrían consistir en “penetraciones”. Entre tanto, la joven se encontraba en un estado total de embriaguez mientras su pareja era plenamente consciente de lo que hacía. En el vídeo aportado por la dirección del programa se puede observar “una manipulación interna en la que José María pudiera ser que estuviera quitando los pantalones y las bragas a Carlota”.
“Esta le comunicó, apenas sin fuerza, la frase ‘no puedo’, sacó uno de sus brazos del edredón y lo dejó caer contra la pared. También se quitó la parte de arriba con dificultad y sacó una mano, posicionándola en vertical y recta hacia José María, en la que pudo manifestarle que parase su acción, la cual pudiera consistir en tocamientos de su cuerpo en base a las oscilaciones apreciadas”, detalla la jueza en el escrito.
Durante todo el auto, se evidencia el presunto abuso sexual de José María hacia su pareja. “Se volvieron a ocasionar desplazamientos por parte de José maría que impulsaban a Carlota hacia arriba y abajo, sin que motu proprio esta reaccionara ante tal estímulo, el cual pudiera consistir, de acuerdo con la posición de José María y su respiración más agitada, en penetraciones”, relata la jueza.
La actitud de José María concluyó cuando el Súper de Gran Hermano les instó a colocarse los micrófonos y a que Carlota se pasara por el “confesionario”. Acto seguido, Carlota comenzó a vomitar y “apenas se movía de la cama”. Por estos hechos, el exconcursante del reality de TeleCinco podría ser acusado de abuso sexual “sin violencia o intimidación y sin que medie consentimiento”.
