El primer centro de Protonterapia de España, que Quirónsalud ha construido en Pozuelo de Alarcón (Madrid), ya ha comenzado a funcionar y ha tratado a su primer paciente.

La protonterapia es una técnica de radioterapia externa más avanzada, con importantes ventajas en el tratamiento de algunos tipos de cáncer con respecto a la tradicional con fotones o electrones.

“Representa una alternativa segura y efectiva en la lucha contra algunos tumores, dado que permite esculpir la dosis de radiación en el mismo, reduciendo el riesgo de dañar los tejidos sanos circundantes", explica el Prof. Raymond Miralbell, Director Médico de dicho centro.

Para distintos tipos de cáncer

Es especialmente útil en “tumores que requieren dosis altas para ser controlados y que están localizados cerca de estructuras u órganos muy sensibles a la radiación que precisan ser preservados”, detalla la Dra. Carme Ares, Jefa de Oncología Radioterápica del Centro de Protonterapia de Quirónsalud.

Está indicada en tumores cercanos al tronco cerebral, la vía óptica o la médula espinal; tumores del área de cabeza y cuello; tumores pediátricos y cánceres recurrentes, incluyendo ulteriormente tumores oculares. Hay que tener en cuenta que “en los niños los órganos todavía están en desarrollo y son más sensibles, por lo que es aún más importante evitar irradiar esos tejidos", apunta.

Más precisa y con menor toxicidad

Gracias a las propiedades físicas de los protones, con esta técnica es posible concentrar con precisión la dosis de radiación especificada por los oncólogos radioterápicos, lo que permite conseguir en muchos casos mayor control local de la enfermedad y menor daño sobre el tejido sano adyacente.

Protonterapia

"El sistema utiliza un haz de alta frecuencia de irradiación, bien adaptado a la sincronización respiratoria y con pequeños haces que ‘pintan’ el tumor con alta precisión y con intensidad modulada, la técnica más avanzada actualmente", añade el Dr. Mazal, Director de Física Médica.

Un plan de tratamiento personalizado

Cuando un nuevo caso llega al centro, un comité multidisciplinar, formado por expertos oncólogos radioterápicos, físicos y técnicos, realiza una evaluación pormenorizada de la historia del paciente, analizando su dossier médico, pruebas previas y estado del tumor, cuentan los profesionales del Centro de Protonterapia de Quirónsalud. El objetivo es crear un plan de tratamiento “totalmente personalizado”, subrayan.

Preparación y planificación

Antes de iniciar el tratamiento, el paciente pasa por la consulta médica, donde el oncólogo radioterápico le explica con detalle el proceso, el plan de tratamiento y el protocolo de actuación. Del mismo modo, resuelve cualquier duda que pueda surgirle.

Tras la consulta, se lleva a cabo una sesión de planificación y preparación del tratamiento y se realiza un TC de alta definición e imagen espectral. Durante la misma, el paciente es informado sobre el procedimiento e inmovilizado con una máscara creada especialmente para él.

La imagen espectral proporciona, no solo una mejor definición de las imágenes de los tumores que van a tratarse, sino también “información específica sobre la composición de los tejidos sanos que se van a someter a la terapia”, señalan los especialistas.

Estudio protonterapia

Con las imágenes del paciente, y utilizando avanzadas herramientas de cálculo, los profesionales diseñan un plan de tratamiento personalizado. Validado éste, se realizan medidas de control de calidad para el tratamiento y todo queda preparado para cuando acuda a su primera sesión.

Un espacio confortable

“En el centro cuidamos que la experiencia del paciente sea lo más satisfactoria posible”, recalca el equipo de este nuevo centro, de ahí que pueda incluso personalizar a su gusto la sala de tratamiento eligiendo proyecciones relajantes.

Para recibir el tratamiento, se sitúa a la persona que va a ser tratada en una mesa que está acoplada a un sistema robótico que permite ubicar su posición en cada sesión con precisión milimétrica. A continuación, una estructura semicircular llamada gantry orienta el haz de protones hacia un isocentro, permitiendo tratar el tumor desde cualquier ángulo. Y tras localizar con precisión el volumen a irradiar, la avanzada tecnología llamada Proteus One de que dispone el centrosuministra una terapia de protones de intensidad modulada mediante la tecnología ‘pencil beam scanning’.

Máquina de protonterapia

Sesiones de 25 minutos

Todo el tratamiento se efectúa desde la zona de control, y cada sesión tiene una duración aproximada de unos 25 minutos, aunque la mayor parte de ese tiempo se emplea en la preparación, colocación, inmovilización y posicionado del paciente.

“El tiempo de irradiación real suele ser del orden de unos pocos minutos”, aclaran los especialistas. Finalizado el tratamiento, el paciente puede incorporarse, salir de la sala y abandonar el centro por su propio pie.

Un equipo de lujo

Profesionales de primer nivel conforman el equipo del Centro de Protonterapia de Madrid. El Dr. Raymond Miralbell fue director del Swiss Proton Users Group y Jefe de Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario de Ginebra (Suiza).

La Dra. Carme Ares, tiene a sus espaldas 15 años de experiencia en Protonterapia, principalmente en el Paul Scherrer Institute de Suiza. El Dr. Alejandro Mazal ha estado más de tres décadas trabajando en el Instituto Curie de París (Francia), los últimos 14 como director técnico de su Centro de Protonterapia y Jefe del Servicio de Física Médica de este organismo.
 

Proteus One: un sistema con experiencia internacional

A este equipo humano, se suma el tecnológico. El Proteus One, el elegido por Quirónsalud para su Centro de Protonterapia, es un sistema optimizado para los tratamientos clínicos con la más amplia experiencia internacional. Se basa en un acelerador de la familia de los ciclotrones que utiliza el 70% de los centros que ofrecen esta terapia en el mundo.

En particular, este sincrociclotrón es un modelo eficiente en energía que, además, ya está adaptado para evolucionar hacia las técnicas que se investigan de cara al futuro próximo, como la terapia rotacional y las irradiaciones de muy alta intensidad, llamadas Flash.