La 37 edición de los premios Goya arrancó este sábado de una manera atípica, con la entrega del Goya de Honor al cineasta Carlos Saura, que fallecía el pasado viernes a los 91 años de edad. Los presentadores Antonio de la Torre y Clara Lago iniciaron la ceremonia rindiéndole tributo al maestro: “Ayer nos dejó uno de los padres y referentes de nuestro cine. Harían falta mil galas para honrar su legado”, comentaron antes de dar paso a la entrega del premio.

El galardón fue presentado y entregado por la actriz Carmen Maura, que trabajó con Saura en numerosas ocasiones: “Me hizo mucha ilusión que le tuviera que entregar el Goya de Honor porque le tenía mucho cariño”, argumentó con mucha emoción entre los aplausos del auditorio del Palacio de Congresos y Exposiciones Sevilla. “Me da mucha pena no haberle podido decir la marca que me ha dejado como actriz para siempre”, sentenció de esta manera Maura su introducción.

Las emotivas palabras de la familia

Tras una larga y emocionante ovación, los seres queridos del cineasta subieron al escenario de los premios para recoger la preciada estatuilla. Su pareja, Eulalia Ramón, fue la primera en dedicarle unas palabras:

“Buenas noches. Muchísimas gracias a todos por tantas muestras de cariño. Muchas gracias a la Academia, a Fernando Méndez-Leite, por este homenaje, por tu apoyo en estas últimas semanas tan importante. Me dijo Carlos que le diera las gracias a Elsa, a su cuidadora, al personal sanitario del hospital de Villalba. Muchísimas por cómo le habéis cuidado y que todo fuera muy triste, pero muy bonito”, aclamó entre lágrimas, dando así paso a sus hijos.

Anna Saura recordó que su padre se dedicó a su profesión hasta el último minuto de su vida: “Nos enseñó que hay que vivir apasionadamente y que la cultura es lo más importante que tenemos y debemos potenciarla, que no entiende de ideologías ni de colores. Es por lo que ha trabajado toda su vida”.

Por su parte, su hijo Antonio Saura ha recordado las cuatro mujeres del cineasta, con una mención especial a Eulalia Ramón, su viuda.

El discurso de Carlos Saura

Finalmente, Ramón retomó la palabra y se dispuso a leer una carta que le dictó Saura antes de fallecer: "A mis 91 años no podía tener mayor satisfacción que recibir el Goya de Honor. Gracias a todos. He sido muy afortunado rodando más de 50 películas. He tenido seis hijos, una hija, una docena de nietos y una bisnieta. Me siento muy afortunado.  Gracias a todos los que han colaborado conmigo y a mis actores y actrices favoritos. Me da mucha pena de no poder estar ahí saboreando este premio con vosotros. Carlos Saura".

Críticas hacia la Comunidad de Madrid y Ayuso

Asimismo, la viuda de Saura insistió que en que su pareja le pidió que diese las gracias y que “la sanidad pública se merece que la cuiden”.

Ante estas declaraciones, la cuenta institucional de la Comunidad de Madrid en Twitter publicó un mensaje en el que se podía leer que "ese hospital es de gestión público-privada, que también funciona", provocando así una nueva controversia.

A su vez, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no dudo en aprovechar el discurso de Eulalia Ramón para transformar su mensaje en un “homenaje” a la sanidad de Madrid: “Agradezco a la viuda de Carlos Saura. El homenaje que ha hecho a la sanidad madrileña”.