La Guardia Civil ha detenido este jueves a la exabadesa del convento de Belorado (Burgos), Laura García de Viedma, tras un registro en el convento realizado por orden del Juzgado de Briviesca. Las exmonjas cismáticas se encuentran implicadas en una disputa judicial con el Arzobispado de Burgos desde el año pasado ya que estas publicaron un Manifiesto católico donde declaraban de innecesarias todas aquellas doctrinas de la Iglesia posteriores al Concilio Vaticano II. Asimismo, estas también negaban la autoridad de los papas, indicando que el papa Francisco I era un “hereje”.
Las exhermanas fueron expulsadas por la Santa Sede de su orden después de que estas empezaran a seguir de forma espiritual a un exobispo excomulgado en 2019 por la Iglesia tras pertenecer a una presunta secta. A raíz de esto, la justicia ha considerado que no deben permanecer en la residencia de Belorado, ya que esta pertenece al Arzobispado según se registra en los archivos de propiedad y catastros.
Hace una semana el Juzgado de Primera Instancia de Bilbao ya había notificado una demanda de desahucio a las exclarisas para que se marcharan del Monasterio de Orduña (Bizkaia). Actualmente ahí se encuentran residiendo cinco hermanas junto algunas jóvenes que las cuidan.
Las exclerisas cuentan con dos causas penales abiertas en su historial por la venta de 1,7 kilos de oro por valor de 121.000 euros y otro por varios delitos de estafa conectados al alquiler de la hospedería del complejo conventual de Derio a un empresario alemán. Además, ya se las había atrapado anteriormente realizando otras actividades irregulares como la cría de perros.
Viedema, conocida como sor Isabel de la Trinidad antes de que El Vaticano la echara a un margen, ha sido arrestada por la Guardia Civil después de que se haya realizado un registro en el convento de Belorado en el que residían las hermanas rebeldes. Las investigaciones judiciales a las que les ha llevado el propio Arzobispado de Burgos las ha posicionado a unas correspondientes declaraciones en los juzgados, donde han renegado del máximo cargo del clero en la provincia, Mario Iceta, mientras se exigía la expulsión de estas por parte de los religiosos.
Este comisario pontificio interpuso una querella en la que iniciaba dos investigaciones: una por el alquiler fraudulento de Derio en el que se busca conocer el destino de los 4.488 euros a manos de un empresario alemán, y el otro es por el intento de apropiación de bienes donde la jueza debe decidir se tratan de delitos de estafa el intento frustrado de poner los bienes de los monasterios de Belorado y Derio a nombre de una asociación civil no inscrita en el Ministerio de Interior.