La semana del 15 de agosto es clave en España. Con un festivo nacional proclive a los puentes para los pocos ciudadanos que no están de vacaciones, se multiplican los desplazamientos y también los excesos. Por eso, la Dirección General de Tráfico ha iniciado hoy, y hasta el 18 de agosto, una nueva campaña para controlar que los conductores cumplan con los límites de velocidad. Un tipo de infracción que es la segunda causa de los accidentes mortales de tráfico.

El 15 de agosto, la fecha en la que más fiestas patronales se celebran por toda España, provoca una infinidad de desplazamientos cortos que, para más inri, se producen en carreteras convencionales, que acumulan la gran mayoría de los accidentes mortales de España.

Accidentes mortales

En el año pasado, el incumplimiento de la velocidad máxima estuvo detrás del 22% de los accidentes mortales. Una cifra que supera la de los accidentes que provoca el alcohol y que solo es superada por los siniestros provocados por las distracciones. Según un estudio realizado en Noruega en 2011, si todos los conductores circulasen por debajo de los límites de velocidad, las muertes por carretera caerían un 20%.  

La campaña de la DGT contra la velocidad se realizará en los principales tramos de riesgo por esta circunstancia y en los puntos donde la circulación suele superar estas prohibiciones. Además, se recordará a los conductores la existencia de estos controles a través de los paneles informativos y señales verticales. Además, se ha invitado a los ayuntamientos a que se sumen a la iniciativa con controles en vías urbanas, donde los peatones son las principales víctimas mortales de los excesos con el acelerador.

Recomendaciones europeas

Hay que tener en cuenta que las recomendaciones de la Unión Europea aún quedan lejos de la realidad de las carreteras españolas. El Sistema Seguro que propone la UE, con el visto bueno de la OMS y la OCDE, se basa en que el ser humano comete errores y en las fuerzas que el cuerpo humano puede tolerar. De ahí, que se recomiende que en las vías urbanas no se superen los 30 km/h, en las intersecciones de carreteras no se pase de 50 km/h y que en las carreteras convencionales de doble sentido se conduzca a 70 km/h para evitar el riesgo de las colisiones frontales.

Fruto de estas recomendaciones, la DGT ya rebajó en enero el límite genérico en carreteras convencionales a 90km/h. Hay que tener en cuenta que en estas vías se produjeron en 2018 el 75% de los accidentes mortales, provocados el 38% por salidas de vía y el 27% por choques frontales.