José María Alonso, decano del Colegio de Abogados de Madrid (ICAM), dirigió el lunes un debate con Alfonso Merlos como protagonista. El periodista y director de Comunicación de la institución, fue el eje de acción del cónclave, sobre todo tras su polémica en el canal de YouTube de Javier Negre.

La discusión desembocó en un aplazamiento en la decisión del Colegio de Abogados sobre el futuro de Alfonso Merlos al frente de la Comunicación de la institución. Se evitó una votación sobre el cese o la continuidad del periodista y, de esta manera, la imagen de división en el seno del ICAM.

Los 14 miembros que conforman la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados se decantaron por mantener a Alfonso Merlos en su puesto, pero con condicionantes de por medio. “Vamos a dar una segunda vuelta a la cosa. Se va a revisar su contrato, se estudiará si es más apropiado un contrato laboral o como autónomo y si puede seguir yendo a las televisiones”, recoge El Confilegal de fuentes del ICAM.

El cónclave del Colegio de Abogados comenzó a las 17 horas de la tarde del lunes y se extendió hasta las 22 de la noche. Cinco horas de deliberaciones que dejaron por el camino tres opiniones favorables a su cese tras la polémica y las incontables horas de televisión que acumula el ya conocido como Merlos Place.

Sin embargo, varios miembros de la Junta de Gobierno próximos a Merlos defendieron que el periodista era una víctima en todo este asunto, tal y como recoge la información publicada por El Confilegal. Invocaron a su derecho a la privacidad y recordaron que, hasta ese momento, nadie había indicado que el periodista ejercía las labores de director de Comunicación del ICAM.

Uno de los argumentos que más poder tuvo durante la deliberación para justificar la continuidad de Merlos fue que, rescindiendo su contrato, el Colegio de Abogados admitía un error en su contratación. Alegaban que, hasta el momento, respondió a lo que el ICAM esperaba de él y arguyeron que se le castigaba por algo que él no buscó.

Sin embargo, los defensores de su rendición subrayaron el duro golpe que este asunto había asestado a la reputación del Colegio de Abogados, por lo que se debían de tomar medidas severas.

Después de más de cinco horas de debate el decano del ICAM propuso aplazar la discusión sobre el futuro de Alfonso Merlos sin que nadie se retratase, una iniciativa que conquistó a la mayoría de los presentes.