Un total de 35 pasajeros han tenido que ser atendidos por los servicios médicos del aeropuerto y el Samur a su llegada a las 20.00 horas a Barajas desde las Islas Mauricio debido a las contusiones, traumatismos y cortes que sufrían. La nave sufrió una caída de 300 metros de altura justo cuando estaba a punto de aterrizar.

Al menos una docena de personas han tenido que ser trasladados al Hospital Ramón y Cajal, al Hospital de La Paz y al Hospital de Sanchinarro.  

Los testigos han apuntado que el avión del vuelo 838 cayó en picado lo que ocasiono que los pasajeros al intentar protegerse saliesen mal heridos con diversos golpes en la cabeza y en las extremidades.

Tal y como informa El Mundo, “otros también han sido golpeados con objetos. "Hemos vuelto a nacer. Creía que el avión se estrellaba", ha señalado una joven que viajaba en la parte trasera del aparato que fue atendida por los médicos del Samur-Protección Civil.

Afortunadamente los pilotos pudieron reconducir el vuelo. Asimismo, se activó rápidamente el plan de emergencias para atender a todos los pasajeros. Se ha confirmado que el avión afectado es un Airbus A330-343 que volaba de Port Louis (Isla Mauricio), que había sido contratado por un operador turístico y no tenía relación con Iberia.