Todos los días desde el inicio de la cuarentena decretada con motivo de la crisis sanitaria del coronavirus los ciudadanos salen a sus balcones y ventanas para aplaudir a los profesionales sanitarios, entre otros, como muestra de agradecimiento por su trabajo. Sin embargo, la Comunidad de Madrid no ha hecho extensible este reconocimiento a sus condiciones laborales. Más bien todo lo contrario.

El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, ante el colapso del sistema sanitario, realizó una contratación masiva de personal a fin y efecto de poder absorber las necesidades de todos los pacientes. Eso fue en marzo. Ahora, se dispone a realizar despidos de igual proporción.

Los sindicatos cifran en aproximadamente 10.000 personas las que regresarán al paro. El diario El Español cuenta la historia de Leticia, de 26 años, una enfermera que emigró dada la falta de oportunidades en España. Trabajaba en Berlín (Alemania) cuando estalló la crisis del coronavirus y regresó a España no solo porque lo veía como una oportunidad laboral, sino para ayudar, puesto que era consciente de que su contrato era mucho peor que el que ya tenía en la capital alemana.

Y de ser héroes en marzo a, mes y medio después, pasar a ser prescindibles. La joven enfermera sabia que al concluir su contrato la despedirían, pero no imaginaba que ni siquiera se cumpliera íntegramente. Y es que, en la letra pequeña, la Comunidad de Madrid se reservaba el derecho a despedir en el momento en que el personal dejara de hacer falta. Y parece que ese momento ha llegado.

"Nos tratan como a ganado", denuncia Leticia, en una entrevista con este periódico. "Siempre nos han tratado así, en periodos de verano y navidad, te contratan y te despiden, pero en una situación cómo la que hemos vivido, poniendo en riesgo nuestra salud, el enfado es mayor. El sistema sanitario ha estado colapsado, y lo hemos visto cuando se han necesitado incluso hoteles medicalizados. Y todo es fruto de los recortes que hemos sufrido en Sanidad. Aún así, parece que les interesa que todo siga igual. Nos tratan como a ganado", crítica Leticia en declaraciones a El Español.