Galicia ha sido el primer anfitrión de la nada agradecida borrasca Herminia en su desembarco en España. El temporal, catalogado como uno de los más intensos de toda esta temporada, ha sembrado el caos en tierras gallegas y promete descargar toda su ira sobre el resto del país. Por ello, tras el fuerte impacto en dicha autonomía, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha optado por activar las alertas por todo el territorio peninsular, ante las altas probabilidades de que sea este lunes cuando se vivan las horas más crudas del temporal. Los expertos climatológicos esperan que en esta jornada se recojan fuertes rachas de vientos, lluvias torrenciales y nevadas significativas, así como un virulento temporal marítimo, especialmente en el norte del país y en zonas del litoral Mediterráneo.
Tan sólo las Islas Canarias se libran de los efectos que causara la borrasca Herminia de manera generalizada, gracias a la protección que le brinda un anticiclón. Galicia es y será la región más castigada por el temporal, elevando el nivel de alerta hasta el rojo por olas de hasta 10 metros de alto en su costa noroeste. En cambio, en el resto del país, las alarmas se suavizan y oscilan entre el naranja y el amarillo. La situación en comparación está a años luz. Y es que en el litoral de A Coruña y Pontevedra se han emitido avisos rojos por fenómenos costeros, mientras que los avisos naranja por fuertes precipitaciones, vientos y nevadas se diseminan por el resto de la autonomía.
En lo que respecta a otras zonas aledañas, como la cornisa cantábrica, también se ha elevado el nivel de aviso a naranja por oleaje y viento. Asturias, Cantabria y País Vasco registrarán olas que alcanzarán en torno a los 8 y 10 metros, mientras que el temporal marítimo se despliega con menor intensidad en el Mediterráneo, donde se prevén olas de 3 a 4 metros de altura en zonas del Estrecho y del Mar de Alborán.
Fuertes rachas de viento
Además de alterar el temporal marítimo, la borrasca Herminia hará soplar con fuerza el viento. La AEMET advierte de potentes rachas que ya superan los 80 kilómetros por hora y que incrementarán su brío durante esta jornada de lunes. Estas serán especialmente significativas en zonas montañosas y áreas expuestas del interior del país, tales como Teruel, Castellón, Valencia y Albacete. En todas estas provincias se mantendrá la alerta naranja, mientras que regiones como Madrid, Toledo, Zaragoza y Ciudad Real se suaviza la emergencia hasta el amarillo, con rachas de viento menos intensas pero que comportan cierto nivel de peligrosidad.
Por su parte, las lluvias serán generalizadas en todo el territorio peninsular, con la salvedad del sureste, donde tan sólo se esperan intervalos de nubosidad. Galicia, el oeste de la meseta Norte y zonas montañosas del Sistema Central recopilarán precipitaciones de alta intensidad, que podrían tornarse persistentes y estar acompañadas de tormentas. De hecho, en estas zonas se prevén acumulaciones significativas de agua, lo que provoca que se incremente el nivel de alerta ante el riesgo de posibles inundaciones.
Además, la borrasca Herminia traerá consigo la entrada de una masa de aire polar marítimo que será notable a lo largo del día, provocando un severo descenso de los mercurios, así como un desplome significativo de la cota de nieve, que se situará entre los 800 y 1.000 metros de altura en el noroeste, y entre los 1.200 y 1.400 en los Pirineos, sistema Ibérico y Sistema Central. De hecho, la Agencia Estatal de Meteorología prevé el riesgo de acumulaciones considerables de nieve en áreas de montaña, lo que complicaría el tránsito en las carreteras de elevada altitud y redoblaría el riesgo de accidentes de tráfico. Por ello, las autoridades pertinentes recomiendan extremar la precaución al circular por estas zonas.
No obstante, los efectos de la borrasca Herminia podrían desaparecer relativamente pronto. Según los expertos de la Agencia, sus inclemencias podrían continuar el martes, con vientos fuertes en el Cantábrico, zonas montañosas, este peninsular y las baleares. No obstante, a medida que pasen las horas, el temporal marítimo comenzará a amainar, aunque el estado del mar seguirá catalogado como de riesgo.
No será hasta el miércoles cuando el temporal dé una pequeña tregua a los españoles. La llegada de otra borrasca atlántica, que desembarcará acompañada de lluvias, nevadas y vientos intensos, cortará de raíz la actividad de Herminia, aunque momentáneamente. Pues ese periodo de calmachicha climático podría cercenarse este mismo jueves, cuando una masa de aire polar provoque la caída en picado de la cota de nieve, situándose en los 500-700 metros en el oeste peninsular.
