A menudo se juzga el pasado desde el maniqueísmo más absurdo y desde la más ridícula superficialidad.
Episodios como el descubrimiento de América son explicados a menudo con dos visiones antagónicas: Una, en la que los españoles eran unos criminales que troncharon la paz y el amor en la que vivía la idílica América precolombina. Y otra, en la que los españoles eran unos héroes que a base de besos y abrazos conquistaron el Nuevo Mundo.
Estas posturas, tan falaces como inexactas, eclipsan otros momentos claves en la historia de la humanidad. Episodios menos simples pero que en gran medida asentaron la base de la libertad del mundo entero. Hablamos de las leyes de Burgos.
De las leyes 50 copias que de las leyes de Burgos se mandaron imprimir, solo nos han llegado 3 copias manuscritas.
Hoy 27 de diciembre, se cumplen 526 años de la firma de esta normativa que no fue una simple ley del siglo XVI sino también el origen de los Derechos Humanos. Para descubrirlo habríamos de trasladarnos a la ciudad de Burgos en el año 1512 cuando Fernando el Católico firmaba este documento en el que se establecían los derechos básicos de los nativos americanos.
Hasta ese momento los reyes de España eran "señores con plena y libre y omnímoda potestad” en América así lo había dicho el papa en su bula 1ª Intercaetera en 1493 y aunque luego parte del territorio pasó a manos Portuguesas, los reyes de España seguían siendo dueños y señores de aquellos lares.
El descubrimiento de nuevas tierras habitadas no tenía paralelismo en la historia por lo tanto cualquier paso que se diese había de ser examinado con lupa pues las consecuencias podían ser fatales, tanto para los súbditos como para los señores.
Si fuera España tan malvada como la pinta la leyenda negra ¿Cómo no nace el derecho internacional en otros países?
En 1495 se pensó en permitir la venta de los indígenas como esclavos pero tal medida duró literalmente 4 días, el 16 de abril de 1495 la reina Isabel zanjó por completo la esclavitud (lo cual no quiere decir que ilegalmente se siguiese traficando con humanos).
En los años siguientes ya con condición de vasallos los indígenas americanos trabajaron en las encomiendas de los españoles, que se comportaban con ellos como con los vasallos en Castilla explotándolos hasta la extenuación. De hecho, Cristóbal Colón también esclavizó a algunos españoles.
Es entonces, entorno al año 1510, cuando surgieron voces discrepantes desde los mismos religiosos españoles, quienes con Antonio de Montesinos o Bartolomé de las Casas a la cabeza denunciaron esta situación generándose un debate apasionante ¿Qué derechos tiene el ser humano por el mero hecho de nacer?
La enérgica condena que Fray Antón de Montesinos hizo en su sermón en 1511, sirvió para que juristas y teólogos creasen las leyes de Burgos. (Fuente: http://amantesdelahistoria-aliado.blogspot.com/)
A Fernando como rey de España (Isabel había muerto en 1504) en poco o nada beneficiaba este debate sobre si sus súbditos tenían o no derechos, sin embargo se prestó al diálogo y ordenó que una comisión, la junta de Burgos, compuesta fundamentalmente por teólogos y juristas, averiguasen qué ocurría con los derechos fundamentales del ser humano..
El punto de partida era el siguiente: Muchos indígenas no estaban bautizados, o lo que es lo mismo, vivían sometidos al pecado original, por lo tanto… ¿perdían sus derechos naturales, de propiedad, estatus, determinación?
Finalmente grandes humanistas como Matías de Paz o Juan López de Palacios Rubios, llegaron a siete conclusiones fundamentales:
1. Los indios son libres y deben ser tratados como tales.
2. Los indios han de ser instruidos en la fe, como mandan las bulas pontificias.
3. Los indios tienen obligación de trabajar, sin que ello estorbe a su educación en la fe, y de modo que sea de provecho para ellos y para la república.
4. El trabajo que deben realizar los indios debe ser conforme a su constitución, de modo que lo puedan soportar, y ha de ir acompañado de sus horas de distracción y de descanso.
5. Los indios han de tener casas y haciendas propias, y deben tener tiempo para dedicarlas para su cultivo y mantenimiento.
6. Los indios han de tener contacto y comunicación con los cristianos.
7. Los indios han de recibir un salario justo por su trabajo.
Las leyes de Burgos se han criticado absurdamente desde el presentismo de nuestros días hablando de explotación, obviando que esas condiciones eran las iguales o mejores que la de cualquier vasallo de Castilla. Muestra de lo innovadoras que fueron las leyes de Burgos en su época fue la negativa de los encomenderos para aplicarlas, desencadenando al postre el asesinato del virrey Blasco Núñez de Vela, enviado desde la corte para hacer cumplir las nuevas leyes.
E incluso se alzaron voces críticas por parte defensores de los indios como fray Pedro de Córdoba quien consideraba que las leyes aún podían mejorar pues seguían muriendo indios (es clave contar que en ese momento se ignoraba por completo el trabajo sucio que estaban haciendo los virus en detrimento de los indígenas).
Aun así, las protestas fueron atendidas, se hicieron nuevas juntas en Valladolid donde surgieron las Leyes Nuevas, destacaría entonces Francisco Vitoria y Francisco Suarez creadores en gran medida del derecho internacional del que nacerían los derechos humanos.
Eleanor Roosvelt con una copia de la declaración de los derechos humanos.