Los trabajadores del servicio de atención telefónica del 112 de la Comunidad Valenciana denuncian unas lamentables condiciones laborales que se suman a todo el caos en la gestión por la DANA en la Comunidad Valenciana. Este servicio está subcontratado por el gobierno autonómico a Ilunion, una empresa de servicios variados entre los que se encuentran los contact center. ElPlural.com ha tenido acceso a testimonios muy duros sobre lo que supone trabajar en estas condiciones.
Una primera trabajadora entrevistada asegura que llevan desde agosto reivindicando sus condiciones, que tienen un absentismo por estrés y ansiedad de entre el 15 y el 20%, y que la empresa, lejos de cubrir las bajas, procede a ampliar la jornada a los trabajadores con horas extra. A su vez, cabe destacar que trabajan bajo el convenio colectivo de telemarketing.
"Es un trabajo que genera muchísimo estrés. Por ahí pasan todo tipo de emergencias como incendios o suicidios. Hay falta de plantilla por la baja de muchos compañeros. Se siente muchísima frustración e impotencia porque nadie te ayuda. Como yo somos muchísimos los que estamos en las mismas circunstancias", arranca la primera trabajadora.
"Cuando se dio el incendio del Campanar (en febrero de 2024) hubo compañeros afectados por estrés a los que nadie les atendió. Somos los invisibles, y somos quienes cogemos la primera llamada. Al estar subcontratado por una empresa privada, todo esto se gestiona desde un punto de vista de sacar beneficio. En vez de mejorar las condiciones, han empeorado", continúa.
Convenio de telemarketing y sueldos congelados
"Estamos en un convenio de contact center. La excusa es que no existe un convenio específico, pero con las responsabilidades que hemos asumido, este no se ajusta a nuestra realidad.
Cada vez que el 112 sale a concurso, se ha aumentado la cantidad de dinero ofertada, pero los gestores tenemos el sueldo congelado desde hace 7 años. Además, no ha habido mejoras en las condiciones de trabajo, hay problemas que llevan ocurriendo desde agosto y que no se solventan como que no se oye a los llamantes o se pierden llamadas...", lamenta la entrevistada.
"Esto no ha sido una preocupación real hasta el día de la DANA. Tenía que pasar tarde o temprano. Imagínate la impotencia como profesional cuando quieres dar lo mejor porque la gente que se está ahogando te necesita y eres tú quien lo oyes y no puedes hacer nada porque tienes problemas de línea, no escuchas o se te corta. Las personas no se ven protegidas", zanja.
Un segundo testigo, que también prefiere permanecer en el anonimato, lamenta problemas similares a los que denuncia su compañera. "Hay zonas en las que los equipos son precarios, pasaba antes de la DANA, y con el aluvión de llamadas más todavía. Habían llamadas en las que no escuchabas, había que volver a llamar y no había cobertura. Tuvo que intervenir gente voluntaria", explica.
"Los recortes tienen sus consecuencias, que ya hemos visto. Es escandaloso que salvo dos o tres, todos los servicios 112 de España están bajo subcontratas y bajo el convenio de telemarketing. No tenemos un marco legal en el que se valore al personal de emergencias. Como es una empresa privada, quiere ganar dinero, y lo hace recortando en personal", afea también.
"Los compañeros que hemos sido afectados nos estamos cogiendo un permiso por el real decreto, no por la empresa. Por parte de la empresa solo he recibido un par de botellas de lejía y de agua y constantes presiones para ver cuándo vuelvo a trabajar, pero nunca te preguntan cómo te encuentras. Perdí un vehículo el día de la DANA y me consta que a los jefes se les ha facilitado un coche, pero al resto no. Lo que molesta es el silencio de las instituciones. La gestión del 112 sigue siendo un tema tabú", sentencia.