Soraya Sáenz de Santamaría ya ha tomado posesión como presidenta de la Generalitat, o al menos en el mundo paralelo de Polònia, el programa satírico de TV3 que esta semana sí se ha emitido. Tras una pausa por el encarcelamiento de medio Govern –“hoy no tenemos ganas de reír”, dijo el programa en Twitter- han vuelto con una Soraya disfrazada de Cristóbal Colón que, acompañada de Cristóbal Montoro, José Ignacio Zoido y una bandera de España toman el control de Cataluña, o el “pequeño reino del arcoíris”, como lo llama la vicepresidenta.

Todo parece sencillo hasta que aparecen unos “indígenas”, funcionarios de la Generalitat a los que, a falta de “pacto fiscal”, intentan comprar con “baratijas” como bolígrafos.

Los funcionarios ofrecen a Soraya la agenda del Govern, pero no se lo van a poner fácil. Inauguraciones o actos con nombres y topónimos impronunciables ponen a prueba el catalán de Soraya, que acaba amenazando a los trabajadores: “¡Os mando a Maza y os meto una querella a los tres por rebelión!”.