El choque en el Senado agendado para este martes entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, y las conversaciones por la renovación del CGPJ copan todos los focos mediáticos. Sin embargo, en paralelo, los Presupuestos Generales del Estado (PGE) 2023 siguen el proceso parlamentario ordinario y ya se han lanzado los primeros envites. Muchos son los obstáculos que habrán de salvar desde su aprobación en Consejo de Ministros hasta la votación definitiva del Congreso el 24 de noviembre. El primer hito se alcanzará este viernes 21 de octubre a las 14:00 horas, momento en que finalizará el registro de enmiendas a la totalidad. De forma discreta y mientras otros sucesos acaparan los titulares, Moncloa negocia con sus socios parlamentarios. En los últimos días se han producido contactos que no han prosperado, hasta el punto de que hay voces que agitan el fantasma de la enmienda a la totalidad, amenazando con tumbar los Presupuestos.

Mientras secretarios de Estado de los diferentes ministerios y otras autoridades desfilan por las comisiones de la Cámara Baja, las formaciones que integran el denominado bloque de la investidura intercambian impresiones y, pese mantener conversaciones fluidas, las posturas apenas se han movido. Fuentes parlamentarias del Grupo Socialista consultadas por ElPlural.com confirman que “hay reuniones y llamadas discretas”. Del otro otro lado, fuentes parlamentarias de sus socios ratifican que las negociaciones son fluidas, pero “no hay avances relevantes”. Incluso, advierten que “a esta hora no está descartada la enmienda a la totalidad”. “Hay mucha tela que cortar”, precisan desde el grupo parlamentario de EH Bildu, uno de los principales aliados del Ejecutivo.

"No está descartada la enmienda a la totalidad"

El propio Oskar Matute, diputado de la izquierda abertzale, advirtió este domingo en una entrevista en Radio Euskadi que si los socialistas se enrocan y proyectan una “actitud cerrada” bloqueando sus propuestas, presentarán una enmienda a la totalidad. Con todo, dijo que su voluntad es “negociar” para “ahondar en la línea de más protección social, de mejoras en las políticas de empleo, en la protección a los mayores y en todo lo que tiene que ver con el Estado del bienestar”.

Tampoco hay progresos en el flanco catalán. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) insiste en vincular las cuentas para 2023 a avances en la mesa de diálogo y en la desjudicialización del conflicto. “Es importante que todo avance a la vez”, afirmó este lunes la secretaria general adjunta y portavoz, Marta Vilalta. En consecuencia, “estamos muy lejos”.

ERC dice que "estamos muy lejos" mientras el PSOE dice no entender que valoren tumbar estos Presupuestos

Pese al sombrío panorama, en el Grupo Socialista reina la calma. Alegan que “seguimos negociando” y “no entenderíamos que, con la situación que tenemos y las ayudas e inversiones que recogen los Presupuestos” las fuerzas progresistas presentaran enmiendas a la totalidad.

Tinta morada para engrasar el bloque

El ala socialista del Ejecutivo es el que pilota las negociaciones, centralizadas en la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quien se apoya en el portavoz parlamentario, Patxi López. No obstante, los morados permanecen al quite para facilitar el entendimiento. El portavoz del espacio confederal de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha asegurado que su grupo se está “volcando para que los Presupuestos puedan salir adelante en tiempo y forma”.

“Entierran la receta fracasada de la mal llamada austeridad neoliberal. Es importante para el Gobierno de coalición sacarlos adelante con una mayoría lo más amplia posible”, ha remachado en una rueda de prensa en el Congreso. Asimismo, ha urgido a los socialistas a replantearse su postura en lo relativo a Vivienda porque “hay muchas medidas para mitigar la factura del gas, energía, transporte público… Pero una de las facturas fundamentales es la de la vivienda y el Gobierno tiene que hacer más”. De igual forma, espera que “el PSOE negocie con nosotros enmiendas para reducir las hipotecas de tipo variable y para que los inquilinos puedan prorrogar los contratos de alquiler como se hizo en la pandemia”.

Con respecto a los reclamos concretos de ERC, Echenique cree que son perfectamente asumibles por el Ejecutivo, incluida la reforma del delito de sedición -si es que la han solicitado-. El dirigente morado admite desconocer si ese punto en concreto forma parte de la terna de peticiones de los republicanos catalanes, como tampoco sabe cuáles son las de EH Bildu y PNV.