La Guardia Civil se ha puesto manos a la obra para amonestar a aquellos miembros de la institución que se dediquen a la retirada de simbología independentista en las calles catalanas. La Benemérita les ha advertido de que, en caso de participar en actividades de esta índole a título particular, habrán cometido una infracción disciplinaria.

A través de un escrito remitido a las diversas unidades de la Guardia Civil, los mandos de la institución han recordado a sus compañeros el incidente que protagonizó un agente el pasado mes de agosto. Una patrulla de los Mossos d’Esquadra identificó a un miembro de la Benemérita entre los integrantes de un grupo dedicado a la retirada de lazos amarillos en la vía pública. La policía catalana le abrió diligencias por un presunto delito de daños en mobiliario público.

La imagen del Cuerpo

La difusión de este acto que acabó con la identificación del miembro de la Guardia Civil ha provocado que los mandos reaccionen y adviertan a sus subordinados. Estas actividades pueden causar “algún tipo de daño a la imagen de la institución”, tal y como se indica en el escrito. Ante ello, la Guardia Civil ha decidido amonestar verbalmente a su agente.

Sin embargo, en el escrito se informa de que “la participación de miembros” del Cuerpo en este tipo de actividades “no resulta conveniente a la imagen” de la propia Benemérita. Por tanto, se ha dado orden a los agentes de no ser partícipes de este tipo de actos que, por otro lado, son sancionadas en la ley orgánica del régimen disciplinario de la Guardia Civil.