Duelo en la cumbre de Twitter. Una vez más, vuelve a celebrarse un derbi en la red social entre el Arturo Pérez-Reverte y el diputado de ERC, Gabriel Rufián, aunque esta vez tenga tintes de Clásico. Porque el escritor ha recuperado un artículo que escribió en el XLSemanal, el suplemento de Vocento, hace casi dos años, en marzo de 2016. Fue a raíz de la sesión de investidura de Pedro Sánchez, pero su visita a la hemeroteca la ha justificado por la intervención de ayer de Rufián, cuando esgrimió en el Congreso unas esposas policiales contra el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido.

Dice Pérez-Reverte que “nos merecemos a Gabriel Rufián. Lo hemos criado entre todos”. “Cada vez que lo oigo, cuando me recobro de la incredulidad y la risa amarga, recuerdo este viejo artículo”, señala.

En dicho artículo, Pérez-Reverte acusaba a Rufián de tener “un discurso a medio camino entre la retórica de Paulo Coelho y el humor de Tip y Coll” y “sesgado, zafio, pobre de sintaxis”. Incluso dudaba de que Rufián le hubiese dado al alcohol antes de hablar en el Congreso: “Llegué a preguntarme si se había preparado antes de subir a la tribuna con algún reconfortante volátil o espirituoso”. Aunque después añadía que “al poco comprobé que nada de eso. Aquél era el estilo propio, el tono auténtico”. Ya aquel entonces, Rufián y Pérez-Reverte se las tuvieron en la red social.

Rufián ha contestado en Twitter con un mensaje que bien vale para su crítica de ahora como para su desprecio a su discurso “pobre de sintaxis”. “Pues me crié leyendo tus libros, Arturo. Un abrazo”.

De momento, en Twitter se ha desatado una guerra de respuestas. Estamos a la espera de que Pérez-Reverte entre al trapo, sobre todo porque a Rufián se le ha escapado un acento en crie que ya no acepta la Real Academia de la Lengua de la que el escritor forma parte. Y nada le gusta más al escritor que corregir faltas de ortografía, incluso cuando no tiene razón.