A lo largo de este jueves hemos asistido a diferentes registros, la Guardia Civil ha entrado para solicitar y buscar información en sedes de empresas de peso en nuestro país. Cuando pensábamos que con los registros en las oficinas de OHL, Indra y Saerco se iba a dar por cerrada la jornada, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha entrado en PriceWaterHouseCooper (PwC) para buscar información que pudiera esclarecer la supuesta financiación ilegal del PP de Madrid.

Todas estas acciones nacen de un denominador común: la ya famosa agenda de Francisco Granados, el que fuera mano derecha de Esperanza Aguirre, ahora una de sus ranas al estar en prisión por la trama Púnica.

Los secretos de la 'agenda morada' de Granados

Cuando registraron la casa de Granados, ex secretario general del PP de Madrid, el 27 de octubre de 2014 la Guardia Civil encontró dos agendas. Una de ellas se ha convertido en una prueba clave para ir desvelando los secretos que el PP madrileño ocultaba en la trama Púnica y sobre su supuesta financiación ilegal.

Aunque la agenda estaba escrita con claves e iniciales difíciles de entender, el juez ha conseguido sacarle provecho gracias a que el constructor David Marjaliza, cabecilla junto a Gradados de la Púnica, la fue descifrando en sus declaraciones con la intención de colaborar a cambio de ver reducida su pena.

Según fuentes judiciales, esas dos libretas contenían la supuesta contabilidad B del Partido Popular, la versión castiza de los papeles de Bárcenas. Ahí se recogía, según dichas fuentes, el detalle del funcionamiento económico de la trama y sus vinculaciones con el Partido Popular. Toda una estructura para enriquecerse Granados y compañía, pero también, presuntamente, financiar a la formación madrileña.