El Astillero, una de las últimas resistencias de Ciudadanos en estas elecciones municipales resulta ser el pueblo en el que vive el candidato del Partido Regionalista de Cantabria (PRC), Miguel Ángel Revilla, donde ha quedado como segunda fuerza más votada con una diferencia de décimas en votos frente al PSC-PSOE.

En este municipio cántabro, de cerca de 20.000 habitantes, Javier Fernández Soberón, repite como alcalde habiendo obtenido el 90% del voto escrutado en la pasada noche electoral, lo que le ha otorgado con soltura la mayoría absoluta necesaria con 15 escaños de 17. En el mismo lugar, el PCR ha perdido cuatro concejales en el Ayuntamiento y que mantuvo durante dos legislaturas.

Bien entrada la mañana del domingo, Revilla acudió a un colegio electoral de Astillero para ejercer su derecho a voto.

Horas más tardes, cuando la noche electoral se convirtió en protagonista, Revilla, con la cabeza alta, convocó una rueda de prensa en la que reconoció la derrota: “La marea de la derecha se ha llevado por delante al PRC”, aseguró. Es así como aseguró que la última legislatura, en la que entraron factores como la pandemia, la inflación, la guerra de Ucrania y la crisis de los trenes del Gobierno central le “han pasado factura”.

En cuanto a las coaliciones que se colocan sobre la mesa en clave autonómica, Revilla considera que PP y Vox terminarán pactando una coalición porque “son lo mismo”.

El mapa que quedó dibujado tras terminar el escrutinio de Cantabria dejó un mar de azul, muy similar a la situación llevada al ámbito autonómico, lo que ha confirmado el cambio de ciclo político en favor del Partido Popular. Pero en lo que, respecto a esta región, el PRC obtuvo más de una veintena de las mayorías municipales, mientras que el PSOE no ha llegado a la decena.

Ciudadanos desaparece

El Astillero ha resultado ser la excepción a la regla, ya que los pronósticos electorales durante la campaña no vaticinaban un buen escenario para la formación naranja. Habiendo transcurrido menos de diez años desde el subidón del partido de centro liberal en toda España y que, en consecuencia, hizo historia ante el bipartidismo que reinaba en la política nacional, ahora la debacle ha terminado por confirmarse en estos comicios autonómicos y municipales.

“Derrota sin paliativos” fueron las palabras que empleó este domingo por la noche uno de los principales rostros de CS que apuntaba a resistir: Begoña Villacís en Madrid. A nivel municipal, la formación también ha obtenido resultados nefastos. Pese a que las encuestas electorales más positivas auguraban un 5% para Villacís, ni tan siquiera ha logrado obtener un 3% de las papeletas. La que hasta la fecha era la abanderada y esperanza de la resistencia del partido, ha perdido más de 265.000 votos y, con ello, ha pasado de tener 11 ediles a cero.

Es especialmente llamativa la caída en picado que no solo se ha producido en la Comunidad de Madrid, donde la formación llegó a gobernar en coalición con el Ejecutivo de Ayuso y manteniendo la vicealcaldía junto a José Luis Martínez-Almeida, sino también en ejemplos como la Comunitat Valenciana, donde en 2019 fueron tercera fuerza con el 17% de los votos y 18 parlamentarios.

Ciudadanos, así, ha logrado resistir en el municipio cántabro en el que reside Revilla, pero también en Ciudad Real y en Segovia, donde la formación ha conseguido cierta representación.

La evidente pérdida de apoyos hacia los naranjas, como se ha visto en el plano nacional, ha recaído directamente en la subida del Partido Popular y Vox, especialmente en el primero, que han conseguido teñir de azul prácticamente todo el mapa electoral.