El presidente del Gobierno en funciones y candidato a la presidencia, Pedro Sánchez, ha hecho de la situación en Cataluña su pivote central del discurso de investidura. Pero además de proponer “retomar el diálogo donde comenzaron los agravios” y “dejar atrás la judicialización”, Sánchez ha expuesto varias de las medidas que impulsará su Ejecutivo.

De entre las propuestas pactadas con Unidas Podemos, ha hecho especial hincapié en la lucha contra el fraude fiscal y la supresión de las amnistías fiscales.

“Es imprescindible luchar contra el fraude con más y mejores herramientas. Vamos a crear una ley contra el fraude fiscal", ha dicho el candidato socialista, quien también ha añadido que el nuevo Gobierno, de conformarse, prohibirá por ley aprobar amnistías fiscales”.

Este anuncio ha estado acompañado de otros muchos otros que figuran en el acuerdo con la formación liderada por Pablo Iglesias. Entre otras, ha asegurado que pretenden “fijar el horizonte del salario mínimo al final de la legislatura en el 60% del salario medio de nuestro país".

Además, “este Gobierno cree firmemente en el diálogo social, por eso proponemos reconstruir consensos rotos y derogar la reforma laboral de 2012”.

Asimismo, “tenemos que avanzar con los agentes sociales en un nuevo Estatuto de los Trabajadores", apunta el candidato socialista”.

En otro orden de cosas, ha aseverado que “en esta legislatura, les adelanto que el Gobierno va a continuar con la equiparación salarial de la Policía y la Guardia Civil. Una medida que es justa y que se ha prolongado de forma injusta a lo largo del tiempo".

Con respecto a las pensiones, ha subrayado que se actualizarán en relación al IPC y se ha comprometido a impulsar un nuevo Pacto de Toledo para garantizar la “sostenibilidad y suficiencia del sistema público de pensiones. Además, se aumentará el poder adquisitivo de las pensiones mínimas y no contributivas”.