Años después, ya como ministro del Interior, ha llevado a cabo una gran labor al frente de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la detención de terroristas de la banda, cada vez más cerca del ansiado final.
Acabo de leer las declaraciones de Javier Arenas, acusando a Rubalcaba de no haber querido nunca "al cien por cien la derrota de ETA". Tal afirmación me ofende no solo como ciudadana sino también como hija de una víctima mortal de esta banda terrorista. Asimismo, le acusa de haber favorecido la presencia de Bildu en las instituciones vascas.
No debería hacer falta recordar al dirigente del PP que el Gobierno instó al Tribunal Supremo a impedir la concurrencia de Bildu a las elecciones; y que fue el Tribunal Constitucional quién decidió su legalización. Decisión que, como todo el mundo puede comprender, no me alegra pero respeto y acato. Como mi padre -que presidió dicho Tribunal durante más de seis años- hubiera querido.
Ana Tomás y Valiente