El pasado jueves el Pleno del Congreso aprobó con 198 votos frente a 140 abstenciones -del PP y de ERC- la iniciativa presentada por el PSOE a través de la que se reclamaba al Gobierno la puesta en marcha de los trámites oportunos para proceder a la exhumación y retirada de los restos del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos.
Sin embargo, la petición de la Cámara quedará aparcada a la espera de un estudio legal exhaustivo del caso. “No se puede tomar aún ninguna medida porque esta proposición no de ley es, precisamente, una mera propuesta. Muy pocas veces he encontrado a gente que quiera vivir de las viejas rencillas”, cuenta a este diario Jaime Alonso, presidente de la Fundación Francisco Franco.
Una Ley de Memoria Histórica que se tambalea
“Su obscena manipulación de la verdad y su intento por borrar la historia nos lleva a que quieran exhumar los restos de una persona en un lugar sagrado. Ellos saben que existe una Ley de Memoria Histórica que es una aberración. Tendrían que modificarla para que esta proposición no de ley se lleve a cabo”, continúa Alonso.
ELPLURAL.COM ha podido comprobar que, de acuerdo con el artículo 16 de la Ley de Memoria Histórica aprobada bajo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, el Valle de los Caídos perdió su condición de monumento funerario político para pasar a ser un lugar de culto.
Todo esto viene a señalar que el Valle de los Caídos no es ya un emplazamiento de memoria franquista y nacional católica, al menos sobre el papel. Sin embargo, apunta Jaime Alonso, esta “Ley de Memoria Histórica lo único que hace es reconocer a una parte y anular a la otra”, excluyendo al Valle de los Caídos de su memoria histórica al “indicar que es una basílica”.
Referente de la dictadura
Desde el PSOE se piensa todo lo contrario. Los socialistas mantienen que en el sentir de la ciudadanía el monumento sigue siendo un referente de la dictadura franquista y, en consecuencia, piden “resignificarlo” a fin de que se vea como un espacio de “reconciliación y democracia”.
“Estos señores llegan al parlamento y creen que representan al pueblo, si es que lo hacen. Me parece muy triste por el nivel intelectual de los que derogan esta ley. Son los que más deben de callar y ocultar”, continúa Jaime Alonso.
La iniciativa del PSOE recibió el apoyo de casi todos los grupos parlamentarios, exceptuando al Partido Popular y a ERC, que optaron por la abstención. Los populares, tal y como explicó Alicia Sánchez-Camacho, creen que esta propuesta rompe el compromiso clave de la Transición, mientras que ERC pretende ir mucho más allá de la exhumación de los restos del dictador.
“Están demostrando que en el Parlamento cada vez hay más inútiles e ineptos, interesados en su bajo intestino. No quieren mirar atrás para reconocerse. Mediante una tergiversación y una falsedad convertida en ley, ahora viene la fase donde está la mentira, la manipulación y que la historia se pase a la contienda política”, sentencia el presidente de la Fundación Franciso Franco.
