El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha reconocido este jueves que la situación en Mariúpol, una de las zonas cero de la guerra con Rusia, es “difícil” y ha alertado que hasta 120.000 personas permanecen “atrapadas” en la ciudad.
De esta manera se ha pronunciado el líder ucraniano en la comparecencia junto al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen. Además, ha agregado que habría unos 400 heridos de los 2.000 militares desplegados en la ciudad.
En este sentido, Zelenski ha ensalzado el trabajo de sus soldados, quienes “trabajando constantemente” por intentar abrir corredores humanitarios seguros, pero los rusos no paran de bloquear las aperturas. "Ha habido una proposición de intercambio, al menos intercambiar heridos por heridos", detallaba ante la prensa.
Las últimas noticias que han llegado desde Ucrania en relación con el preocupante estado de Mariúpol es que la ciudad llevaría bajo el control ruso desde hace tiempo, una teoría que no ha dudado en confirmar, aunque ha puntualizado que aún hay una parte en la que persisten sus tropas. La masacre humana de esta localidad portuaria, junto a la de Bucha, ha hecho que se extienda la preocupación por todo el mundo, llegando a tildar las masacres como posibles crímenes de guerra comandados por el Gobierno de Vladimir Putin.
Putin suspende sus maniobras en la acería de Azovstal
Este mismo jueves, el mandatario ruso ha dado la orden de suspender la ofensiva de sus militares hacia la acería de Azovstal, punto que sería el último atisbo de resistencia ucraniana en Mariúpol. El motivo principal de esta decisión se ha sustentado en “salvar la vida y la salud de los soldados y oficiales” rusos, según ha trasladado el ministro de Defensa, Sergei Shoigú.
Con estas afirmaciones, Rusia ha llamado a las fuerzas ucranianas a entregar las armas: "Rusia garantiza su vida y un tratamiento decente, en línea con las leyes internacionales", subrayaba, aunque, a continuación, advertía de que la zona permanecerá vigilada y bloqueada.
Ucrania cifra en “cerca de 21.000” los soldados rusos muertos en combate
Las Fuerzas Armadas de Ucrania han señalado este jueves que “cerca de 21.000” soldados rusos han muerto en combate desde el inicio de la invasión el pasado 24 de febrero.
Del mismo modo, han señalado que la ofensiva rusa ya está continuando sus operaciones en el este del país “para establecer el control total de los territorios de las regiones de Donetsk y Lugansk". "El enemigo ruso sigue llevando a cabo ataques con misiles y bombardeos contra infraestructura militar y civil en Ucrania", condenaba el Estado Mayor del Ejército ucraniano.
Jersón sería en estos momentos el enclave en el que las tropas rusas están recrudeciendo sus ataques: "Los ocupantes rusos fijaron el objetivo de bloquear totalmente la ayuda humanitaria a la región de Jersón por parte de las autoridades ucranianas", manifestaba.