Tras la reunión entre las delegaciones rusas y ucranianas este lunes en Estambul, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha anunciado un nuevo intercambio de prisioneros de guerra y cadáveres, adoptando un trato de “todos por todos” que incluye, según el ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umerov, soldados, así como prisioneros de guerra enfermos y heridos. El asesor del presidente ruso, Vladimir Medinsky, ha confirmado que ambas delegaciones también han intercambiado un memorándum con las condiciones de ambos bandos para una paz en Ucrania.
"Las negociaciones en Estambul acaban de finalizar y estoy esperando un informe completo del ministro Umerov. Han intercambiado documentos mediante la parte turca y nos estamos preparando para una nueva liberación de prisioneros de guerra", ha declarado Zelenski en una rueda de prensa tras la cumbre con líderes de la OTAN en la capital de Lituania, Vilna.
Las expectativas para la reunión eran bajas; pese a haber llegado a un alto el fuego en el mar Negro en marzo, las conversaciones entre ambos países han tenido pocos avances hacia la paz más allá del intercambio masivo de prisioneros. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha criticado a los dirigentes de los dos actores por dificultar el proceso de negociaciones y, pese a tener un rol protagonista como principal mediador del conflicto, parece que la delegación estadounidense se ha retirado parcialmente, por lo menos públicamente, del proceso de negociaciones.
Medinsky ha señalado que la delegación rusa ha mostrado su intención de establecer un alto el fuego breve, con una duración de entre dos y tres días y solo en zonas “fronterizas”. Dicha tregua permitirá la recogida de cuerpos, pero no se ha avanzado sobre los repetidos llamamientos del gobierno ucraniano para establecer un alto el fuego de 30 días.
"Si Rusia convierte la reunión de Estambul en palabras vacías, tendrá que haber un nuevo nivel de presión, nuevas sanciones, no solo por parte de Europa", ha resaltado Zelenski este lunes. "Necesitamos sanciones conjuntas a nivel del G7, incluyendo a Estados Unidos, y de todos los países que deseen la paz", ha añadido, lo que está enmarcado en un contexto de la preparación del decimoctavo paquete de sanciones de la Unión Europea contra Rusia. Trump, a pesar de la recuperación de sus relaciones con Rusia, ha amenazado con imponer su propio paquete de sanciones contra el país ruso por entorpecer las negociaciones, aunque no se ha aplicado ninguno aún.
No obstante, el senador Lindsey Graham anunció el viernes pasado que el Senado estadounidense está trabajando sobre la imposición de sanciones sobre Rusia a raíz del conflicto ucraniano. Por ello, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se ha reunido con Graham este lunes y ha felicitado el proyecto de ley: “La presión funciona, dado que el Kremlin no entiende nada más. Por eso, la presidenta le da la bienvenida al compromiso del senador Graham de aumentar la presión sobre Rusia y avanzar con la propuesta de ley en el Senado la semana que viene”.
Por su parte, el presidente de Turquía, Tayyip Erdogan, ha señalado su intención de reunir los dirigentes de Ucrania y Rusia en Ankara o Estambul, algo que se intentó recientemente, pero que finalmente fue rechazado por el Kremlin. “Mi deseo es reunir a Putin y Zelenski en Estambul o Ankara. También es de invitar a Trump a esta reunión también…Tomaremos los pasos para esta reunión después de las conversaciones más recientes”, ha señalado el presidente turco.
Zelenski pide que no se permita que el "hambre" ruso por la guerra continúe
Junto con el anuncio del acuerdo hallado entre las delegaciones rusas y ucranianas, Zelenski también ha cargado contra Putin durante la reunión de la OTAN este lunes. Ha instado a las organizaciones internacionales para que se tomen “decisiones firmes” y que todos tienen que “trabajar juntos para hacer que esto [la presión] realmente suceda. Es posible”.
La presencia de Ucrania en la OTAN también ha sido tratada durante la reunión. Pese a las afirmaciones de la administración de Trump que prometía que Ucrania nunca formaría parte de la alianza transatlántica y el hecho de que uno de los gérmenes de la invasión rusa en 2014 fue la solicitud ucraniana de entrar en la alianza, Zelenski ha instado a que no se permita que Putin decida los miembros de la OTAN. “Si se permite que Putin decida quién se une a la OTAN, dónde puede estar o no estar la infraestructura de la OTAN, entonces el apetito ruso por la guerra solo crecerá”, ha señalado el presidente ucraniano.
“El agresor no debe recibir ninguna compensación por la guerra”, ha insistido Zelenski en sus redes sociales. Además, ha zanjado que “Putin no debe recibir nada que justifique su agresión. Cualquier compensación solo le enseñaría que la guerra da resultados”.
El presidente ucraniano también ha señalado que la cumbre de La Haya en junio será una oportunidad para crear una respuesta homogénea para frenar la ofensiva rusa en Ucrania: “La cumbre de la OTAN en junio es el momento y el lugar correcto para mandar un mensaje claro: Rusia no va a conseguir nada de esta guerra.”